Tras la orden de la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios de la toma de posesión de la Empresa de Servicios Públicos de Santa Marta (Essmar), un grupo de personas y trabajadores de la empresa rechazaron dicha intervención protestando en el lugar.
Los manifestantes aseguran, a través de redes sociales, que lo sucedido es un proceso “injusto” y que conlleva tintes políticos.
Debido a los disturbios, la Policía Nacional hizo presencia y se ocasionaron enfrentamientos entre los manifestantes y la Fuerza Pública. Además, la revuelta obligó a la presencia del escuadrón antidisturbios para garantizar la seguridad de la superintendente.
El exconcejal de Bogotá, Hollman Morris, expresó su opinión escribiendo a través de Twitter: “A esta hora fuertes disturbios en la empresa de servicios públicos de Santa Marta. Los samarios salen a defender su empresa rescatada por el gobierno progresista de Carlos Caicedo en 2019. Gobierno de Iván Duque bloquea administración de Santa Marta solo por ser progresista”.
Así mismo, la gerente de la Essmar, Patricia Caicedo, dijo sobre dicha intervención que “no es más que una maniobra politiquera para repartirse los recursos de los samarios entre los mismos congresistas que han saqueado al departamento y la ciudad. Sigue Duque atropellando los derechos de los ciudadanos que eligieron el Cambio”.
“Duque vino en Campaña a prometer la solución del agua, pero en gobierno solo ha sabido bloquearnos los proyectos, ahora le arrebatan a los samarios su empresa pública para entregársela a quienes detrás de MetroAgua se robaban la plata de la ciudad. No tienen vergüenza”, afirmó Caicedo.
Más opiniones se dieron con el aviso de la SuperServicios como la del exalcalde de Santa Marta, Rafael Martínez, quien escribió en sus redes sociales: “Nadie dijo que sacar a las élites del poder iba ser fácil, nuevamente Iván Duque atenta contra los gobiernos que no se arrodillan al sistema: interviene la empresa de servicios públicos; van 4 intervenciones en Santa Marta y el Magdalena. El fin: devolvérselo a las mafias y clanes regionales”.
La SuperServicios indicó que la toma de posesión de la Essmar se da al determinar que no tiene la capacidad técnica, operativa, administrativa y financiera para garantizar la debida calidad, cobertura y continuidad de los servicios de acueducto y alcantarillado a los habitantes de la capital del Magdalena.
La diligencia fue liderada por la superintendente, Natasha Avendaño García, con el acompañamiento de la Dirección de Intervenidas de la entidad y el apoyo de la Dirección General de la Policía Nacional.
“Con fundamento legal tomamos la decisión de intervenir a la Essmar porque presenta una crítica situación que genera graves perjuicios a sus usuarios y pone en riesgo su sostenibilidad. Los resultados de la vigilancia especial que realizamos a la empresa desde el momento del inicio de la operación, en 2019, evidencian deficiencias en la cobertura, continuidad y calidad de los servicios de acueducto y alcantarillado para sus más de 117 mil suscriptores. A esto se suman las deudas pendientes con la Dian, la Gobernación del Magdalena y otros acreedores que podrían generar embargos judiciales que agravarían las condiciones financieras de la empresa y la reducida capacidad de pago de sus compromisos mercantiles”, dijo Avendaño.
Según la Superintendencia, las deficiencias de Essmar persisten desde el 2019 y se agudizan cada vez más por la grave situación financiera que presenta el prestador.