Uno de los factores en materia de viabilidad en la capital son los huecos que tienen sus carreteras. De hecho, varios de los accidentes con motos, bicicletas y autos se deben a las complicaciones de infraestructura en los carriles.
Cada rincón de la ciudad tiene alguna afectación en la malla vial y, aunque la Alcaldía ha tratado de mitigar la situación, la situación prevalece. Desde luego, las denuncias públicas son cada vez más visibles y con la ayuda de las redes sociales la información se viraliza al instante.
La concejal Diana Diago se ha encargado de hacer visibles las complicaciones que los bogotanos enfrentan en su diario vivir, como los huecos que más repercuten en la movilidad y el transporte.
Localidades como Suba y Engativá presentan complicaciones para lograr un correcto trayecto. Por ejemplo, ciudadanos del barrio Bonanza, ubicado al noroccidente de Bogotá, se han manifestado en Twitter y comentado que llevan una década esperando una solución por parte de los organismos encargados para eliminar algunos huecos de la carrera 70G entre calles 78 y 79.
Bogotá tiene varias avenidas de suma importancia donde vienen y van cientos de conductores, pasajeros, ciclistas y motorizados. Una de las avenidas con mayor afluencia es la Boyacá, donde se arman trancones según el horario.
La Avenida Boyacá recorre la ciudad de norte a sur en la zona occidental, por lo que su mantenimiento es indispensable para la ciudadanía. No obstante, se han hecho denuncias públicas en plataformas digitales donde se da prueba de las tormentosas alteraciones que tiene la vía entre la calle 117 y la 170; los conductores deben tratar de cambiar la ruta para evitar trágicos accidentes, pues, como se manifiesta, el carril está hueco.
Sumado a esto, otra situación de la misma índole se presenta en la carrera 11B con carrera 1C Este, aledaña al barrio San Isidro de la localidad de Santa Fe. Allí se reporta que hay una erosión subterránea y, aunque los vecinos la han tapado con escombros y otros elementos, su cavidad no ha podido ser rellenada.
Desde luego, son muchos los casos de impactos negativos en Bogotá. Por eso, hace poco se efectuó un debate en el Concejo distrital y el tema central estuvo ligado al deterioro de las carreteras; en la reunión se pudo establecer cuáles son las localidades que presentan más huecos a pesar de los trabajos que se han venido adelantando desde la Alcaldía.
La clasificación se da en cuatro grupos y cada uno de ellos está resaltado por un color, parecido a los semáforos de la ciudad, donde, con la ayuda de un mapa, se muestra cada localidad en relación con los porcentajes del estado de la malla vial que se encuentran en mal estado:
Grupo 1, verde, casi ninguna carretera en mal estado:
- Antonio Nariño: 2 %
- Mártires: 3 %
Grupo 2, verde tenue, menos del 11 % de las vías en mal estado:
- Tunjuelito: 6 %
- Teusaquillo: 7 %
- Barrios Unidos: 10 %
- Chapinero: 10 %
- Puente Aranda: 11 %
- Santa Fe: 11%
Grupo 3, amarillo y naranja, menos de la mitad de vías en mal estado:
- San Cristóbal: 16 %
- Rafael Uribe Uribe: 17 %
- Fontibón: 19 %
- Usaquén: 19 %
- Engativá: 21 %
- Kennedy: 21 %
- Candelaria: 23 %
- Suba: 24 %
- Bosa: 24 %
- Ciudad Bolívar: 34 %
Grupo 4, rojo, más de la mitad de la malla en mal estado:
- Usme: 55 %
- Sumapaz: 60 %
El llamado Plan de Choque contra los huecos, que fue activado por la administración de Claudia López, estableció la meta de tapar 56.000 huecos a partir del 25 de diciembre, apelando a la información ciudadana, por lo que pidieron a los habitantes de la capital reportar los huecos. De allí que los ciudadanos vean en la redes sociales un mecanismo de denuncia y representación de las situaciones que los acarrean constantemente.