Los hechos denunciados ocurren desde el pasado 20 de agosto en el territorio ancestral Kutunsama, en el Resguardo kogui malayo arhuaco, ubicado entre el río Don Diego y la zona rural de Santa Marta de Perico Aguado, que tiene salida al mar Caribe.Según el comunicado de la Comisión Nacional de Territorios Indígenas (CNTI), cerca de 200 personas invadieron el territorio y comenzaron un proceso de tala de árboles y parcelación del predio. La comunidad dice que estas personas han hecho uso de cintas para demarcar el terreno y han cortado diferentes árboles, dañando el equilibrio ambiental de la zona. Además, según el comunicado, “amenazaron con tumbar los árboles grandes tras argumentar que el Estado no los ha reubicado ni dado tierras”.
“Este es un lugar donde los mamos, líderes y grupos indígenas tienen su intercambio de conocimiento, de tradiciones y de trabajo cultural. En la zona que se denomina la lengüeta, que es desde el río Don Diego hasta el río Palomino, varias personas invadieron el territorio destruyéndolo todo. En principio eran 50 y fue aumentando ahora son casi 1.000 personas de distintos lugares que buscan parcelar y acabar con toda la vegetación”, dijo Jaison Pérez, miembro de la comunidad arhuaca. Le puede interesar: Indígenas amazónicos denuncian mortandad de peces en caño TakanaAunque la Policía y la Personería del Pueblo hicieron presencia el viernes 20 de agosto, el comunicado señala que: “en la madrugada de este viernes 21 de agosto las actividades fueron reanudadas por los colonos, provenientes de las zonas aledañas de Guachaca, Palomino, Marquetalia, Puerto Nuevo e incluso (se cree) desde Venezuela. Sin embargo, no hubo acuerdo y la Fuerza Pública manifestó no poder hacer nada porque "hay intereses de otros grupos más grandes", dice el comunicado. “Desde el año 1994, este lugar es declarado resguardo de salida al mar mediante la Resolución 29 de ese año. Nosotros hemos tratado de recuperar este territorio ancestral porque cultural y ambientalmente tienen una importancia muy grande”, explicó Pérez, por su parte. Le sugerimos: El kogui que amó la Sierra tanto como a su vida Para los pueblos indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta este es un territorio sagrado y además es un área de conservación ambiental. El comunicado de la CNTI en otro de sus apartes asegura que eEstos fenómenos son facilitados y promovidos por la falta de formalización y la inseguridad jurídica que sufren los territorios indígenas debido a la negligencia estatal. Actualmente, en la Agencia Nacional de Tierras (ANT) existen 1009 solicitudes de formalización de territorios indígenas en resguardos. Tal es el caso del Resguardo kogui malayo arhuaco que va por su cuarta solicitud de ampliación aún no resuelta y que responde a la ausencia de integralidad en el reconocimiento de los territorios ancestrales por parte del Estado”.
Las personas que ingresaron al territorio talaron la vegetación y parcelaron las tierras. Por su parte, Jaison Pérez alertó sobre las amenazas presentes en la zona recordando que “acá la entidad de Parques tenía una sede, pero mataron a un funcionario. El director de Parques de la zona terminó saliendo por distintas amenazas porque él era una persona que cuidaba y conservaba el ambiente. Ahora llegan personas que destruyen todo”. Las comunidades indígenas que allí habitan ven con preocupación que con la cuarentena, producto de la emergencia por coronavirus, ha aumentado la presencia de grupos de personas que invaden y destruyen su entorno. Varias versiones señalan que estas personas son enviadas por grupos ilegales para apropiarse de los terrenos, mientras los pueblos indígenas claman por la presencia del Ejército y las autoridades. A su vez, piden ayuda al gobierno nacional y regional para la atención de la covid-19. Por eso, Jaison Pérez, miembro del pueblo arhuaco hizo un llamado a que: "entendamos la importancia del lugar, la importancia geológica, cultural, geográfica, ambiental que esta frente al mar Caribe. Si acabamos nuestro patio o nuestro balcón que tenemos de la Sierra estamos atentando contra el equilibrio del ecosistema. El llamado al gobierno y a los distintos entes es a que tomemos conciencia y podamos resolver de la mejor manera esta situación y conservemos estos espacios”.