Muchas personas encuentran en la religión y en la oración el camino y la ruta indicada para establecer una comunicación con Dios y así pedir por las situaciones de necesidad de cada persona, ya sea trabajo, salud propia o de allegados, trabajo, sabiduría, prosperidad y más.
Aunque hombres y mujeres acuden especialmente a las iglesias o a las capillas para orar con más fe, también hay quienes lo hacen desde cualquier lugar como el hogar, pues lo que es realmente importante es la devoción con la que se realizan las plegarias.
Hay muchas personas que no tienen la misma resistencia ante las tentaciones y ceden ante las mismas, así sean perjudiciales, por lo que se considera que son pecadores. Un claro ejemplo de esta situación es la infidelidad, pues a pesar de tener pareja acceden a tener una o varias más.
Versículos de la Biblia para pedir por mujeres y hombres pecadores
- Lucas 5:32
No he venido a llamar a justos, sino a pecadores para que se arrepientan.
- Lucas 6:33
¿Y qué mérito tienen ustedes al hacer bien a quienes les hacen bien? Aun los pecadores actúan así.
- Santiago 4:8
Acérquense a Dios, y él se acercará a ustedes. ¡Pecadores, límpiense las manos! ¡Ustedes los inconstantes, purifiquen su corazón!
- Salmo 1:1
Dichoso el hombre
que no sigue el consejo de los malvados,
ni se detiene en la senda de los pecadores
ni cultiva la amistad de los blasfemos.
- Salmo 25:8-9
Bueno y justo es el Señor;
por eso les muestra a los pecadores el camino.
Él dirige en la justicia a los humildes,
y les enseña su camino.
- Mateo 9:13
Pero vayan y aprendan qué significa esto: “Lo que pido de ustedes es misericordia y no sacrificios”. Porque no he venido a llamar a justos, sino a pecadores.
- Romanos 5:19
Porque así como por la desobediencia de uno solo muchos fueron constituidos pecadores, también por la obediencia de uno solo muchos serán constituidos justos.
- Romanos 5:7-8
Difícilmente habrá quien muera por un justo, aunque tal vez haya quien se atreva a morir por una persona buena. Pero Dios demuestra su amor por nosotros en esto: en qué cuando todavía éramos pecadores, Cristo murió por nosotros.
- Lucas 24:67
No está aquí; ¡ha resucitado! Recuerden lo que les dijo cuando todavía estaban con ustedes en Galilea: “El hijo del hombre tiene que ser entregado en manos de hombres pecadores, y ser crucificado, pero al tercer día resucitará”.
- Proverbios 11:3
A los justos los guía su integridad; a los falsos los destruye su hipocresía.
- Gálatas 2:15-16
Nosotros somos judíos de nacimiento y no “pecadores paganos”. Sin embargo, al reconocer que nadie es justificado por las obras que demanda la ley, sino por la fe en Jesucristo, también nosotros hemos puesto nuestra fe en Cristo Jesús, para ser justificados por la fe en él y no por las obras de la ley; porque por éstas nadie será justificado.