La infidelidad es una de las principales causas de separación en una relación sentimental. Psicólogos y expertos aseguran que una persona es infiel por razones personales en las que la costumbre, apatía y falta de amor tienen mucho que ver.
En Colombia, ser infiel representa una situación dolorosa, familias pierden su hogar o los matrimonios de años llegan a su fin.
Perdonar una infidelidad puede ser algo difícil, existen casos en los que el rencor se apodera y es el actor del desamor que genera problemas de comportamiento. Cada ideología tiene una posición en relación con el engaño, por ejemplo, en China hay un control para las mujeres que son infieles a sus esposos.
Por otro lado, Colombia tiene diversidad de personas y culturas, pero eso no quiere decir que deba haber un motivo para ser infiel, al contrario, según un estudio efectuado por Gleeden “la infidelidad es una decisión, no un error”, asegura Stephania Soto, líder de la investigación que se centra en el análisis del promedio de personas que han engañado a su pareja en Colombia, allí la mujer sostiene que cada acto es consciente.
Mediante una encuesta realizada a más de 6.500 sujetos, quienes dieron a conocer su postura en relación con el tema y, una investigación de más de 6.200 publicaciones en portales web, se pudo determinar qué es lo que se habla en el país al momento de mencionar la infidelidad.
Empezar desde cero y con el corazón roto es un sentimiento y acción que nadie le desea ni a su peor enemigo, el amor tiene su propia forma de actuar y puede ser líquido, según el sociólogo Zygmunt Bauman. Precisamente, a raíz del protagonismo que produce el engaño, Gleeden constató que lo que más se habla en la internet es sobre la infidelidad y por ello existen foros, charlas y conversaciones que ahondan este tema a grandes rasgos.
No obstante, la investigación señala que el hecho de cometer un acto de desamor tiene un tiempo y no es el que vincula directamente a la persona infiel: “siempre la ven en tercera persona, es decir, como una situación alejada o ajena”, explica Soto.
Con las encuestas que se realizaron, los resultados indicaron que el 63 % de las personas han sido infieles, el restante (37 %) sostuvieron que no han tenido la ‘necesidad’ de engañar o meterse con otros individuos. Por otro lado, un 51 % respondió que serían infieles en algún momento de sus vidas y 49 % descarta esta posibilidad sin excepción.
En consecuencia, se concluye que “6 de cada 10 colombianos han sido infieles, en comparación con 5 de cada 10 que lo consideran. Esto significa que 1 de cada 10 lo ha hecho, pero no lo ha considerado”, consigna el estudio de población.
Si bien es cierto que la infidelidad puede tener varios puntos de vista, al parecer, es una constante que se entromete en las relaciones de pareja, independientemente del tiempo de unión. Son comportamientos complejos y singulares en cada situación particular donde está marcada por la fragilidad de los vínculos, dice Bauman.
Por su parte, el filósofo Alain Badiu argumenta que para que haya fidelidad debe haber compromiso: “Fidelidad es el compromiso de construir una duración, a fin de que el encuentro se vea liberado de la casualidad. Es la fidelidad al acontecimiento del amor”, asegura en su obra ‘El elogio del amor’.
Todo radica en que las posiciones respecto a la infidelidad son complejas, por un lado hay quienes lo ven como una acción normalizada, centrada y fugaz, otros consideran que “todo el mundo es igual” y para algunos la infidelidad es el final de la relación,
Sumado a esto, el citado estudio de Gleeden reveló que posiblemente las mujeres pueden ser más fieles; 8 de cada 10 hombres son infieles, en comparación con 6 de cada 10 mujeres.
Expertos en terapia de pareja dicen que la confianza es la esencia y base de toda relación, el derecho a ser feliz con alguien devenga paciencia, comprensión y respeto mutuo. “El amor verdadero triunfa sobre los obstáculos que el lugar, el mundo y el tiempo puedan plantearle”, comparte Alain Badiu.