Una de las imágenes insólitas que dejó la jornada de manifestaciones de los vecinos de la carrera Séptima fue la unión de concejales de Bogotá abismalmente opuestos en su pensamiento político y unidos para protestar contra el proyecto del corredor verde por la carrera Séptima, que actualmente está terminando la fase de socialización y en marzo se podrían lanzar los prepliegos.
En la mega obra se invertirán cerca de 2,5 billones de pesos y quizá uno de los puntos más polémicos es que eliminará el tránsito de vehículos particulares de norte a sur, entre la calle 100 y el parque nacional, con lo cual, según dicen algunos manifestantes, miles de familias que viven en el corredor de la Séptima quedarán atrapados, sin posibilidades de llegar a sus casas a bordo de sus carros.
En el lugar se encontraron la concejal del Centro Democrático, Diana Diago, y el concejal del Polo Democrático Alternativo, Carlos Carrillo, que coinciden en afirmar que el proyecto del corredor verde es una estocada para la movilidad en el oriente de la ciudad.
“Lo que Claudia López quiere imponer a las malas va a acabar con la movilidad de los bogotanos, con la movilidad de este sector, de la zona norte. Un llamado para que la alcaldesa venga, se reúna con esta comunidad, con el director del IDU y escuche: cómo van a quitar todos los carriles de la 100 en adelante en el sentido norte sur, eso no puede pasar en Bogotá”, dijo la concejal Diana Diago.
Carlos Carrillo, el representante del petrismo en el cabildo, planteó por su parte que “al Concejo no ha llegado la creación de la empresa “corredores verdes”. Esto lo va a operar la empresa Transmilenio, porque es un “Transmilenio”, así la alcaldesa le quiera decir “corredor verde”. Por aquí van a pasar buses a cargo de la empresa Transmilenio”.
Las dos fuerzas políticas criticaron también la manera como el Esmad intervino la manifestación, utilizando una bomba aturdidora y después un gas lacrimógeno, en una protesta en la que estaban participando esencialmente personas mayores y, por eso, señalaron directamente a la alcaldesa Claudia López de haber dado la orden para dispersar la manifestación que llevaba cerca de 1 hora bloqueando el paso de los vehículos particulares y los buses, en el sentido note sur, en plena hora pico.
La alcaldesa criticó el hecho de que tanto el uribismo como el petrismo estén lanzando puyas a su administración y desde su cuenta de Twitter escribió: “sectarismo y clasismo une las campañas de esos sectores del uribismo y petrismo. Bogotá rechaza su oportunismo politiquero. No van a parar el metro, ni la educación pública, ni el transporte público eléctrico ni el corredor verde séptima.”
El director del IDU, Diego Sánchez, explicó a SEMANA que hay un plan de mega obras para brindar soluciones a los vehículos particulares que hoy en día recorren la carrera Séptima. “En la calle 92 con 7ma habrá un puente vehicular que conecte directamente con la avenida Circunvalar, eliminando la intersección semafórica. En la calle 85, va a haber otro puente que conecta al norte con la vía al centro y por debajo pasarán los carros que van hacia la Calera”.
El funcionario dijo que hay planes similares en las intersecciones de la Calle 134, de la calle 127 y se mejorará la carrera 11, donde además prácticamente se eliminará el transporte público para que esa vía sea utilizada por los carros particulares prácticamente en su totalidad.
Sánchez defendió el proyecto del corredor verde, al plantear que el 70 % de los viajes diarios por la carrera Séptima se hacen en transporte público y adelantó que una vez se tengan las vías exclusivas para los buses se reducirán los tiempos de desplazamiento hasta en un 50 % de una persona que desde Usaquén necesite llegar hasta el centro de la ciudad.