NUEVA YORK - "El año pasado reflejó la transformación de nuestra base económica, pero creemos que lo peor para nuestra economía está detrás nuestro", dijo el jueves en un informe el gobernador, que pertenece al Partido Demócrata. Paterson encargó a su nuevo vicegobernador Richard Ravitch que presente un plan de recuperación para septiembre. Ravitch, un asesor político y financiero, ya diseñó el plan de Paterson para rescatar a la agencia de transporte masivo de Nueva York. El impacto de la crisis se refleja en un pronóstico de una caída histórica del 4,8 % este año en los salarios pagados a los neoyorquinos. La baja, la mayor en 30 años, está "claramente correlacionada" con los menores bonos que están pagando a sus empleados algunos bancos y corredoras de bolsas, explicó en una conferencia telefónica el director de Presupuesto del estado, Robert Megna. Megna se mostró menos optimista que Paterson, al decir que recién el próximo verano boreal la economía "tocaría finalmente el fondo y volvería a crecer". El empleo en el sector financiero caería un 5,2 % este año y seguiría bajando el próximo, estimó Megna. Unas 40.000 personas más necesitarían ayuda estatal, lo que llevaría el total de gente bajo el alero del estado a 554.200 para el ejercicio fiscal 2013. Megna señaló que al menos otros 14 estados del país y Washington D.C. han anunciado déficit que suman US$30.000 millones, por lo que en este contexto los problemas de Nueva York no deberían llevar a las agencias de riesgo a recortar la calificación del estado. "No creemos que haya alguna razón para que las agencias cambien nuestra calificación", afirmó. (Reuters)