Dejar de pagar arriendo para tener casa propia es uno de los sueños que tienen los colombianos cuando después de algunos años de trabajo empiezan a ahorrar los recursos suficientes para tomar este gran paso. Muchas entidades financieras ofrecen programas para tomar crédito hipotecario, cada una con diferentes tasas de interés y condiciones. Entre ellas hay una que se diferencia de la banca normal y se trata del Fondo Nacional del Ahorro (FNA), que no es un banco, pero se comporta como uno al ofrecer diferentes tipos de crédito. Siga leyendo: ¿Cómo pasar sus cesantías de un fondo privado al Fondo Nacional del Ahorro? Y como recibe el apoyo por parte del gobierno nacional y tiene una de las tasas más bajas del mercado, se convierte en una opción más cómoda para endeudarse, sobre todo si no se tiene una vida crediticia que permita lograr la financiación que una casa requiere. Para poder hacerlo con el FNA usted tiene que ser afiliado, debe hacer parte de un cargo público o privado y devengar un salario. Si ese salario incluye cesantías y se afilia para que le consignen las cesantías en la entidad, eso le da derecho a presentar su solicitud de crédito. También puede abrir una cuenta de ahorro voluntario contractual si es independiente. En ese caso ahorra durante 9 o 12 meses según el caso y al cabo de ese tiempo reúne el puntaje suficiente para hacer objeto de credito. Diego Cano Hernández, Jefe de Investigación y Desarrollo del FNA, afirma que “luego tendría que presentar los certificados de ingresos y los documentos requeridos para efectos de que vayan conjuntamente con su solicitud. Los ingresos y la capacidad de pago determinan el monto que se le ve a a prestar”. ¿Cómo se aumenta el puntaje? Para hacer su solicitud de crédito debe cumplir con un puntaje mínimo requerido, el cual logra con: El cumplimiento y la puntualidad de sus pagos en las fechas acordadas. La consignación de la cuota de su ahorro fijada en el contrato. El monto total de su ahorro. El puntaje requerido es de 400 puntos, que si lo divide en 12 meses le da un valor de 33.3 puntos mensuales, y para alcanzarlos debe cumplir con su cuota de ahorro el mismo día de cada mes. Esto es primordial. Tenga en cuenta que, si el día que debe consignar cae un sábado, domingo o festivo, su pago tendrá que ser realizado el último día hábil antes. Por ejemplo, si la fecha que eligió es el 15 de cada mes y justo cae un lunes festivo, su pago debe realizarse el viernes 12, para que este quede registrado y obtenga su puntaje mensual. Si hace esto durante todos los meses del año, recibirá un monto adicional a su ahorro por intereses, podrá solicitar su crédito de vivienda o educación y podrá convertirse en propietario o estudiar lo que quiera. Por el contrario, si incumple con la puntualidad de su pago o con el valor de la consignación, tendrá que hacer un otrosí (documento jurídico que introduce otro apartado al contrato principal) y reponer los puntos de la siguiente manera: Si el incumplimiento es de un mes: debe ahorrar durante dos meses más al finalizar el tiempo del contrato de su ahorro. Si el incumplimiento es de dos meses: debe ahorrar durante cuatro meses más al finalizar el tiempo del contrato de su ahorro. Si el incumplimiento es de tres meses: debe ahorrar durante siete meses más al finalizar el tiempo del contrato de su ahorro. Y si el incumplimiento es de cuatro o más meses: pierde el puntaje, sin opción a subsanarlo.

Por lo que es fácil lograr su puntaje si consigna el valor pactado en su contrato de ahorro voluntario, cumple con la puntualidad en los pagos y si al finalizar el año de ahorro tiene como mínimo el monto pactado en su contrato. Le puede interesar: 3 señales que indican que no debe comprar casa ¿Los jóvenes sí están comprando? Actualmente se cree que la población joven se encuentra interesada en adquirir experiencias nuevas más que en objetos o inmuebles, por lo que adquirir una vivienda puede no ser una prioridad. Pero Cano afirma que las estadísticas muestran todo lo contrario. “El 60% de los créditos que nos solicitan son personas que están entre 25 y 35 años, por lo que aquí se ve un interés de la gente joven por comprar vivienda”. Y como tienen unas tasas que se acomodan al nivel de ingreso de la persona y además el gobierno acompaña ese tipo de créditos con algunos subsidios (ya sea subsidio a la tasa o subsidio a la compra), entonces eso hace que sea mucho más llamativo el acceso para los jóvenes. “Todo el mundo quiere tener vivienda y es mucho mejor para jóvenes estar amortizando un crédito para pagar su propia vivienda y no estar pagando un arrendamiento que en ese sentido no está amortizando nada y no está pensando en el futuro”, dice. Y aunque ahora los jóvenes tienen más movilidad por el mundo, el experto afirma que igual también quieren pensar en que van a ser más adultos y requieren tener alguna estabilidad. Uno de los deseos de entidades como el FNA es tratar de resolver el tema de que más o menos el 40% de la población colombiana vive en arrendamiento. “La tarea nuestra es tratar de que el mayor número de personas acceda a vivienda y que no pierda su plata pagando arrendamiento”, concluye Cano. Así que ya sabe, si quiere hacer realidad su sueño debe ser muy juicioso con sus pagos, no dejarse colgar e intentar hacerlo siempre el día hábil antes de la fecha del pago. De lo contrario perderá la oportunidad de aplicar al crédito y sus hábitos financieros se verán perjudicados. FP recomienda: En vivienda nueva cuál es más rentable, comprar apartamento o casa