Colombia, según cifras del Centro Nacional de Memoria Histórica, cuenta con más de 80.000 personas desaparecidas víctimas de la violencia. Esta altísima cifra de personas desaparecidas se traducen 82.998 familias que luchan por encontrar respuestas en un país que no tiene; miles de familias que no han podido cerrar un ciclo, que viven en duelo y que convierten a Colombia en un país en duelo. Erika Diettes (Cali, 1978) lleva más de 10 años trabajando alrededor de las víctimas del conflicto en Colombia buscando no solo hacerlas visibles sino ayudarlas a sanar a través de las manifestaciones artísticas esa pérdida que ha dejado la guerra en el país. Por medio de ‘Relicarios’, su más reciente trabajo, la artista caleña rescata esos objetos que representan lo más preciado para las familias de los desaparecidos, ya sea porque fue lo último que tocó o porque era su elemento favorito y los transforma en una reliquia, en un objeto sagrado para quien lo duele y que busca darle paz a quienes no la han tenido desde el día que no volvieron a ver al ser querido.
Fotografía de la exposición en la Universidad Jorge Tadeo Lozano. Foto: Cortesía Erika Diettes. ARCADIA conversó con la artista con motivo de su más reciente exposición en el Museo de Artes Visuales de la Universidad Jorge Tadeo Lozano que se inaugura hoy 9 de agosto y va hasta el 30 de septiembre de 2018. Le puede interesar: La vida en el hormiguero ¿Qué la llevó a trabajar en ‘Relicarios’? Llevo muchos años trabajando en torno a las víctimas y dolientes del conflicto. ‘Relicarios’ es un paso, una consecuencia lógica de mis trabajos anteriores ¿Cómo llega usted a las familias? A través del trabajo de campo de muchos años con dolientes del conflicto con los que he realizado toda una labor a través de grupos de apoyo psicosocial a las víctimas. La exposición recientemente se realizó en Argentina ¿Cuál fue reacción de los visitantes de ese país frente a una exposición tan íntima como lo es ‘Relicarios’? Fue muy interesante porque estábamos en el ex - ESMA, un espacio que servía como antigua Escuela de Mecánica de la Armada durante la dictadura, y que se transformó hace muchos años para dedicarlos enteramente a la memoria. Fue un recibimiento y una acogida muy fuerte por parte del público que también se sentía interpelado por la obra. Usted le entrega a la familia que le donó los objetos una foto del Relicario terminado ¿Por qué hacer esto? Porque es algo que siempre he trabajado de esta manera, es acercarnos a la comunidad, evidentemente Relicarios es un trabajo de duelo, la historia de los objetos no es sólo recibir los objetos son conocer sus testimonios y lo que ellos representan, ausencias y presencias en la familias. Entregar la foto del ‘Relicario’ es algo lógico, es recibir algo transformado, recibir parte del proyecto.
Relicarios from erika diettes on Vimeo.