En la búsqueda constante de conseguir un cabello largo y saludable, muchas personas han recurrido a remedios y tratamientos caseros, algunos de los cuales pueden parecer extraños a primera vista. A lo largo de la historia, se han transmitido generación tras generación, y aunque la ciencia aún no ha confirmado por completo su efectividad, vale la pena explorar estas curiosas soluciones.
Tratamientos caseros para que el cabello crezca
Té de Cebolla
Una de las técnicas caseras más comentadas para estimular el crecimiento del cabello implica el uso de té de cebolla. Para preparar este remedio, debes hervir varias cebollas en agua durante unos minutos y luego aplicar el líquido resultante en tu cuero cabelludo.
Se dice que los antioxidantes y minerales de la cebolla estimulan los folículos pilosos, pero el aroma desagradable es un inconveniente para muchos.
Aceite de Pescado
Si bien tomar suplementos de aceite de pescado puede mejorar la salud del cabello, algunas personas optan por aplicarlo directamente. Este líquido es rico en ácidos grasos esenciales, como el omega-3, que se cree que nutren los folículos capilares. Sin embargo, debes estar preparado para el olor a pescado que puede persistir en tu cabello después de aplicarlo.
Aceite de Serpiente
En algunas culturas, los masajes con aceite de serpiente se han considerado un método efectivo para el crecimiento del cabello. Se cree que el aceite de serpiente, generalmente derivado de plantas y no de reptiles, fortalece el cuero cabelludo y mejora la circulación sanguínea. La idea de aplicar un aceite con ese nombre puede resultar espeluznante, pero su uso continúa en algunas comunidades.
Agua de Arroz
El agua de arroz es un antiguo remedio de belleza utilizado en Asia y se obtiene remojando arroz en agua y luego utilizando el líquido resultante para enjuagar el cabello. Se dice que el agua de arroz fortalece el cabello y lo hace crecer más rápido. A pesar de la falta de evidencia científica sólida, muchos juran por sus beneficios.
Aceite de Emú
Este aceite, extraído de la grasa del ave emú, es rico en ácidos grasos y se ha utilizado en la medicina tradicional durante siglos. Se cree que promueve el crecimiento del cabello y mejora la salud del cuero cabelludo, aunque su origen animal puede plantear preocupaciones éticas para algunos.
Cerveza
Algunas personas enjuagan su cabello con cerveza para darle volumen y brillo, pues se cree que los ingredientes de esta bebida, como la levadura y las proteínas, fortalecen el cabello. Sin embargo, el olor a cerveza puede ser un obstáculo para muchos.
Aceite de Ricino
Este remedio contiene ácido ricinoleico, que se cree que mejora la circulación sanguínea en el cuero cabelludo y nutre los folículos capilares. Muchos lo aplican en sus raíces, aunque su textura espesa y pegajosa puede resultar incómoda.
Infusiones de ortigas
Se cree que las ortigas son ricas en nutrientes esenciales, como hierro y silicio, que pueden mejorar la salud del cabello. Aunque esta hierba a menudo se utiliza en productos capilares comerciales, algunas personas optan por hacer sus propias infusiones en casa.
Máscara de huevo
La mascarilla de huevo es otro remedio casero popular para el crecimiento del cabello. Se mezclan huevos con otros ingredientes, como aceite de oliva, y se aplican en el cabello durante un período de tiempo determinado. Los nutrientes del huevo, como la biotina y las proteínas, se cree que fortalecen el cabello, aunque puede resultar complicado de aplicar y lavar.
Antes de probar cualquiera de estos métodos, es fundamental investigar y consultar a un profesional de la salud o un dermatólogo. Además, es importante recordar que el cabello sano depende en gran medida de una dieta equilibrada y cuidados regulares, como evitar el exceso de calor y químicos.