El Ministerio de Salud hizo una importante aclaración este miércoles frente al posible regreso a clases presenciales en colegios y universidades, anunciado por la Alcaldía de Bogotá que flexibiliza algunas de las restricciones en la ciudad tras superar el pico de la segunda ola de la pandemia de coronavirus.
“Sobre la presencialidad en colegios y universidades en Bogotá, con aforos reducidos, desde el MinSalud queremos precisar que en el comité asesor del pasado 2 de febrero no fue aprobada esta medida”, fue la advertencia de la cartera de Salud en Twitter.
De inmediato, la alcaldesa respondió aceptando que, en efecto, el comité epidemiológico nacional del ministerio le informó el martes “que se abstenía de emitir ese concepto porque los lineamientos de bioseguridad para el regreso gradual, progresivo y seguro del sector educativo lo da MinEducación y la Secretaría de Educación en sus competencias”.
Explicación del MinSalud
SEMANA consultó con voceros del Ministerio de Salud el alcance de la advertencia hecha por redes sociales, y le explicaron a este medio que, así como los toques de queda y otras determinaciones de restricción de movilidad las imparte el Ministerio del Interior, siempre bajo concepto técnico del Ministerio de Salud, lo mismo pasa en el caso del Ministerio de Educación, que trabaja en conjunto con cada secretaría y autoridades territoriales.
En este caso, en Bogotá se estableció un porcentaje específico de población para todos los colegios, que sería del 35 %, pero el MinSalud no está de acuerdo con establecer aforos específicos para todos los colegios, según explicaron desde esa cartera.
Es decir, la posición del ministerio es que cada colegio debe evaluarse individualmente y no están de acuerdo con que el aforo sea general para todos.
Se esperaba que los colegios privados regresaran a clases presenciales bajo el modelo de alternancia el lunes 8 de febrero, mientras que los públicos aplicarían este modelo desde el lunes 15 del mismo mes, según anunció el Distrito en las últimas horas.
En rueda de prensa en la tarde del martes, López señaló que los colegios regresarían a clases “dando prioridad a la educación inicial”. Para el caso de las universidades, la mandataria señaló que podrán funcionar presencialmente entre las 10 a. m. y las 4 p. m., y las 7:00 p. m. y las 11:00 p. m., con un aforo máximo del 35 %.
Por otra parte, el ministro de Salud, Fernando Ruiz, hizo un pronunciamiento al respecto y aseguró que el mayor interés del Gobierno es que los estudiantes regresen a las aulas, siempre que la pandemia lo permita, para evitar graves consecuencias de salud física y emocional; riesgos de maltrato intrafamiliar y efectos negativos de no pasar suficiente tiempo al aire libre, entre otros.
En principio, según lo decidido por el Distrito jardines, colegios y universidades deberían cumplir los protocolos determinados para el sector educativo y contar con el registro y la aprobación de la Secretaría de Educación Distrital para retomar nuevamente su presencialidad gradual y progresiva.
“Nuestra segunda gran prioridad es el retorno gradual, progresivo y seguro a las instituciones educativas. Privados: a partir del lunes 8 de febrero. Públicos: a partir del 15 de febrero. Universidades: horarios de presencialidad y solo podrán tener aforo del 35 %”, señaló la Alcaldía de Bogotá a través de su cuenta oficial de Twitter.
Sin embargo, luego de la advertencia del Ministerio de Salud sobre la falta de aprobación para el regreso a clases, no queda claro si el plan de la Alcaldía de Bogotá sigue en pie.
Por lo pronto, sumado a ese cambio, la alcaldesa también anunció el fin de las cuarentenas en las Unidades de Planeamiento Zonal (UPZ) a partir de este martes 2 de febrero a las 11:59 p. m., así como la implementación nuevamente de horarios diferenciados para los distintos sectores de la economía, de tal manera que los establecimientos de comercio podrán operar de 10 a. m a 11 p. m., el sector manufactura de 10 a. m. hasta las 5 a. m. y el de construcción entre las 10 a. m. y hasta las 7 p.m.
Con respecto al pico y cédula, la medida se mantiene para establecimientos comerciales, públicos y bancarios; sin embargo, estarán exentos los restaurantes, los gimnasios, el sector cultural l (cines, teatros y museos) y los parques de diversiones y temáticos, los cuales de manera obligatoria deberán cumplir con el distanciamiento de dos metros entre mesas o puestos, mantener ventilación adecuada del sitio y garantizar que se cumplan todas las medidas de bioseguridad.
“Bogotá va a seguir dependiendo todo este año de nuestro cuidado individual y colectivo, de adoptar y cumplir las medidas de cuidado que acordamos como ciudad. A partir de hoy podemos pasar del momento más difícil de alerta roja y empezar a entrar a alerta naranja, mantener una nueva manera de vivir con ciertas restricciones, pero también con la posibilidad de desarrollar nuestras actividades”, aseguró la alcaldesa.