Con todo respeto quiero referirme al 'Confidencial' que apareció en el #904, para rectificar algunas afirmaciones inexactas en torno a la participación de Colombia en la Expo 2000 Hannover, el certamen internacional más importante a comienzos del nuevo siglo.En la nota se afirma que Colciencias se opone a la propuesta de unas ONG para que el pabellón de Colombia sea construido en guadua, lo cual no corresponde a la realidad. El gobierno colombiano aceptó la invitación del alemán y designó al director de Colciencias como comisario general.Una de las primeras actividades fue la convocatoria de un concurso público, para seleccionar el diseño bajo la dirección de la Sociedad Colombiana de Arquitectos con el fin de asegurar la mayor transparencia y seriedad posibles. La propuesta ganadora fue la del arquitecto Daniel Bonilla, profesional de reconocido prestigio en el país.Es legítimo que una ONG internacional como organización privada que es, haya decidido participar en la Expo con un pabellón propio, pero lo que es inadmisible es que su campaña para buscar fondos se haga desacreditando el proyecto del gobierno colombiano y que intente confundir a la opinión sugiriendo que su pabellón es o podría ser el pabellón colombiano. Dicha ONG, escogió un pabellón con especificaciones que distan mucho de las que requiere un país para su participación, y cuyo costo es aparentemente de dos millones de dólares. Es para 'compartir' este pabellón, que esta ONG ha solicitado un aporte del gobierno colombiano de un millón de dólares.Según la misma ONG, en su pabellón se presentará una muestra proyectos de países como Brasil, Suecia, Japón, Benin, Namibia y Fiji. Por supuesto todos éstos tendrán su propio pabellón oficial en la Expo, y hasta donde conocemos a ninguno se ha solicitado una contribución similar a la que se solicita al gobierno de Colombia. Alvaro Mendoza Arango, director de ColcienciasBogotá