Con la apertura del mercado de pases del ciclismo, se han empezado a disipar algunas dudas sobre el futuro de los colombianos que se acercan al final de su contrato. Nairo Quintana (Arkéa-Samsic) y Rigoberto Urán (EF EasyPost) se perfilan a renovar sus vínculos actuales, mientras que Fernando Gaviria tendría los días contados en el UAE Team Emirates.
“El contrato de Fernando termina esta temporada. Por el momento no hemos iniciado ninguna negociación. Eso es algo que veremos en los próximos meses”, dijo Mauro Gianetti, director general de la escuadra emiratí, a VeloNews, dejando en el aire la continuidad del velocista colombiano para el próximo año.
Los dueños del UAE han puesto como prioridad conformar un equipo fuerte en la clasificación general, gracias a los grandes logros que han conseguido con Tadej Pogacar, por lo que la disputa de las etapas al esprint ha pasado a un segundo plano. Lejos de querer victorias de etapa, el objetivo de los directivos es estar cada vez más cerca del Ineos y el Jumbo-Visma, las dos alineaciones que han comandado el ranking de la UCI en los últimos años.
Según el portal Calcio e Finanza, el ciclista de La Ceja (Antioquia) gana 1,8 millones de euros por temporada, lo cual lo ubica en el puesto 20 de este ranking, encabezado por el esloveno Tadej Pogacar con 6 millones de euros anuales. Esa es otra de las razones por las que la renovación se puede quedar estacanda, si es que Gaviria no decide resignar algo de ese sueldo para quedarse en un equipo que, seguramente, protagonizará los próximos años del deporte pedal.
El viernes pasado el Emirates informó sobre cuatro renovaciones al interior del equipo, pero en ninguna de ellas se encontraba la del antioqueño. Rafal Majka y Brandon McNulty firmaron hasta el año 2024, junto al danés Mikkel Bjerg y del italiano Diego Ulissi, confirmando que la prioridad es mantener la columna vertebral al servicio de Pogacar.
Ante esa situación, Gaviria ya ha empezado a escuchar ofertas, aunque se enfoca en terminar de la mejor manera la temporada para ver si, cosechando algunas victorias, logra convencer a Gianetti y su grupo de trabajo. En caso de confirmar su cambio de aires para el 2023, la principal opción que tiene Gaviria es el Total Energies, para ser compañero del experimentado esloveno Peter Sagan.
Lo positivo es que la escuadra francesa tiene una buena nómina de corredores para disputar las etapas de velocidad, pero, en contraste, significaría que Gaviria baje de categoría World Tour a disputar la Pro Series, lo que significa que solo podrá asistir a las grandes vueltas si reciben la invitación de los organizadores, caso similar a lo que vivió Nairo en el Arkéa.
Hasta el momento, Gaviria tiene contrato con el equipo de los Emiratos Árabes hasta finales de 2022. Sin bien el año pasado consiguió que le renovaran por un año más, sus actitudes durante el Giro no fueron del gusto de los directores y, sumado a los resultados de las etapas en las que debería ser protagonista, han provocado que los dueños del UAE duden de acercarle una nueva oferta.
Aunque el colombiano manifestó sentirse en un gran estado físico para la primera grande del año, hubo rivales que se mostraron algo más fuertes y le negaron la posibilidad de sumar un triunfo más en la ronda itálica, en la que suma un total de cinco, cuatro en 2017 y una más en 2019.
Serán entonces meses tensos para Gaviria mientras decide lo que pasará con su futuro, con la esperanza de que su equipo se retracte en la decisión de dejarlo salir y pueda continuar en la élite del deporte.