Los aficionados del ciclismo ven cada vez más cerca el regreso de Egan Bernal a la élite, y aunque en su equipo han sido cautos sin dar una fecha específica, el corredor ha dado un sinnúmero de muestras de que ya está listo para arrasar con todo en el asfalto, donde lo esperan rivales de alto calibre como Tadej Pogačar y Jonas Vingegaard, dos corredores que lideran la nueva generación.
Con exigentes entrenamientos en montaña y carretera, Egan ha dado un claro ejemplo de resiliencia, lo cual ha sorprendido a más de uno que luego del accidente no veía un pronto retorno del colombiano.
En su último examen, Egan volvió a dar cátedra sobre su caballito de acero. En esta oportunidad, junto a su compañero Nicolás Roche, pusieron a sufrir a el piloto estadounidense Gustavo Menezes, campeón de las 24 Horas de Le Mans en el año 2016.
El colombiano y el irlandés le dieron una lección al campeón de automovilismo. Mientras el norteamericano sufría para subir una pendiente en las carreteras europeas, los pedalistas escalaban ese ascenso sin mayor dificultad.
“Porque las cosas no eran lo suficientemente duras, ahora llevamos más de 2 horas; oh, sí, vamos. Gracias, chicos”, fueron las palabras de Menezes a los dos ciclistas.
El excampeón dio muestras de su sufrimiento en la montaña, pues aseguró que se podía “escuchar la agonía en mi voz”. El corredor de 27 años reveló los datos de la rodada, la cual todavía tenía camino por recorrer. Un total de 2 horas, 30 minutos y 31 segundos; 59 kilómetros completados; inclinación del 5 % y velocidad media de 14,8 km/h, fueron las estadísticas parciales.
Cautela en el INEOS
En la Vuelta a Burgos no fue, pero la afición colombiana sigue esperando noticias sobre el regreso a competencias de Egan Bernal. El campamento del INEOS Grenadiers en Andorra –con el joven maravilla a bordo– fue todo un éxito; sin embargo, no llegó a ser suficiente para incluirlo en la nómina en la que sí se encuentra su compatriota Brandon Rivera.
Como ya lo había adelantado el propio Egan, la mente está puesta en competencias de nivel medio, es decir, lejos de los exigentes retos que quedan en este remate de la temporada. Sobre esa misma base están parados los directivos, que no tienen afán en firmar el regreso del zipaquireño, a menos que tengan la certeza de no poner en riesgo su capacidad física luego del grave accidente que sufrió en enero.
Rod Ellingworth, subdirector de la escuadra británica, habló esta semana al respecto de la situación del colombiano, dejando en el aire que su regreso, incluso, tendría que esperar hasta el próximo año. “Hemos hablado mucho al respecto y no hay certeza de que vaya a competir, pero nos gustaría verlo correr antes de fin de año”, dijo en entrevista con Cycling Weekly.
La ilusión del propio corredor es soltar las piernas en el final de esta temporada, pero no lo hará si su equipo no da el visto bueno. La Vuelta a España está prácticamente descartada, pero en Italia todavía quedan algunas competencias más en las que podría participar, como el Giro de Lombardía el sábado 8 de octubre, con más de dos meses para seguir acumulando sensaciones positivas.
“Todavía tenemos que decidir qué tipo de carrera será”, aseguró Ellingworth, haciendo referencia a las clásicas de un día o carreras semanales que implican un poco más de esfuerzo para el cuerpo. “Es demasiado decir que está haciendo los mismos números (que antes) pero está entrenando bien, está dedicando horas y está progresando bien”, añadió el directivo del INEOS.