Miguel Ángel López continúa siendo tema de debate en la prensa española por la supuesta investigación en su contra por tráfico de medicamentos en el caso del médico Marcos Maynar. El pasado jueves, cuando el ciclista colombiano aterrizó en el aeropuerto de Madrid-Barajas, fue retenido unos minutos por la Guardia Civil española, dando pie a la versión de Ciclo21 sobre las sospechas en su contra.
Horas después de la gran repercusión que tuvo la nota del medio especializado, oficiales de la entidad gubernamental salieron a aclarar que se trataba de un control rutinario y no de una detención como se dio a entender en la nota.
Después del chequeo a su equipaje, Supermán continuó hacia su destino con total normalidad, sin saber todo lo que vendría en camino por la versión de prensa sobre lo sucedido en territorio español. Aunque el colombiano ya estaba en la lista de testigos del ‘caso Maynar’, siempre según Ciclo21, ahora entraría como sospechoso de los cargos que se le adjudican al médico.
Ante ese panorama, los abogados salieron a aclarar que Miguel Ángel nunca fue detenido y tampoco lo ha sido en sus 28 años de vida, pues desmienten que haya estado inmerso en cualquier hecho delictivo que tuviera que ver con Maynar o los productos médicos de los que lo acusan.
A pesar de ello, el medio español especializado en ciclismo insiste en que el colombiano sí está bajo investigación, aunque admiten que no fue detenido por la Guardia Civil. “Efectivamente, nunca lo fue”, aclaró el periodista Fernando Ferrari, quien firma el texto publicado el pasado 21 de julio.
Producto de esta información, López se encuentra apartado del Astana a la espera de aclarar todo ante la justicia española y ante los medios de comunicación que siguen esperando su defensa sobre los señalamientos que tienen en duda su participación en la Vuelta a España, que inicia el próximo 18 de agosto, y en la que estaba citado como uno de los líderes del equipo.
El argumento del medio español para insistir en la investigación contra el colombiano es que la orden de investigación fue realizada por un juzgado y no por las autoridades que chequearon su equipaje en el aeropuerto. “Por ello, la Guardia Civil hubo de aclarar también que no fue retenido, sino que se le requirió para el desarrollo de la investigación ordenada por la jueza y no por la fuerza de seguridad española”, indicó Ciclo21 en una actualización a la nota principal.
Al respecto de esta noticia, SEMANA se intentó comunicar con el ciclista, su esposa y su suegro, Rafael Acevedo. Este último, exciclista, ratificó su confianza en El Mono, como le dice de cariño.
“¿Cómo van a decir que El Mono es traficante?”, fue lo primero que indicó al contestar la llamada de este medio. “No he podido hablar bien con ellos. Lo único que me dijo Natalia, mi hija, es que les revisaron las maletas. Que es una rutina normal y los dejaron ir”, apuntó y finalizó.
“Yo no puedo decir mucho porque poco sé, pero no tengo ninguna duda, estoy seguro de que el chino no tiene nada”, afirmó con contundencia.
SEMANA también le consultó si cree que el Astana tomó una decisión acelerada al suspenderlo indefinidamente de las competencias oficiales. “Claro, pero es que hay medios muy amarillistas”, contestó.
Extraoficialmente, se conoció que Supermán dará unas declaraciones a los medios en los próximos días, a la espera de lo que le aconsejen sus abogados y la reunión de más detalles al respecto de la supuesta investigación que pone en peligro el remate de su temporada con la alineación kazaja.