La decimoquinta jornada del Tour de Francia dejó a Jasper Philipsen (Alpecin-Deceuninck) como el gran vencedor del día. El corredor belga lo dejó todo en los metros finales en un apasionante esprint, junto a Wout van Aert (Jumbo Visma) y Mads Pedersen (Trek-Segafredo), para terminar sumando una victoria en el Tour de Francia 2022 a su palmarés.

No fue un día sencillo para nadie en el pelotón. Fueron más de 200 kilómetros los que tuvieron que pedalear los ciclistas bajo temperaturas abrasadoras de hasta 40 ºC. A pesar de esto, la fuga no tardó en armarse y entre estos corredores estuvo Wout van Aert. No obstante, los directores del equipo lo hicieron frenar: “Era innecesario hacerse todo este recorrido y gastar energías, cuando el pelotón estaba muy bien organizado para controlar a los corredores que se quedaron al frente”, comentó Alberto Contador para SEMANA en la ruta.

Aunque en el último ascenso el Alpecin-Deceuninck se puso a tirar del pelotón y algunos embaladores se quedaron colgados, posteriormente, volvieron a meterse en el grupo de carrera. Si bien Benjamin Thomas (Cofidis) lanzó un ataque que le costó al pelotón neutralizar, pero “al final terminó ganando un corredor de muchísima calidad”, resaltó Contador.

Sin embargo, el exciclista español hizo énfasis en lo que verdaderamente marcó la jornada del día, más allá del ganador: “Hemos visto cómo primero se ha producido una caída con dos corredores del Jumbo, Wout van Aert y Steven Kruijswijk. Este último parece haber tenido rotura de clavícula y ha tenido que abandonar el Tour de Francia”, contó el panelista español, quien dejó claro que, junto a la baja de Primož Roglič, el líder de la general Jonas Vingegaard no va a tener nada fácil la defensa el ‘maillot’ amarillo.

Y es que eso no fue todo. Más adelante, el líder y Tiesj Benoot tocaron tierra y, aunque lograron continuar, caerse nunca es bueno: “En un día en el que consideramos como ‘tontos’ en el Tour en los que, por lo general, no pasa nada, vemos como no ha salido Roglič por decisión del equipo y Kruijswijk se ha ido a casa, situaciones que lo que hacen es abrir mucho más el Tour de Francia”, resaltó Contador.

El problema es que Vingegaard se ha quedado con tan solo un escalador puro como Sepp Kuss para afrontar los Pirineos durante la tercera semana de competencia, lo cual abre aún más la batalla por el maillot amarillo entre este corredor y Tadej Pogačar (UAE Team), quien tampoco es que cuente con muchos gregarios por temas de la covid-19.

Esta situación también podría beneficiar al resto de favoritos que, si bien están algo lejos de estar en lo más alto de la general, podrían tener más opciones de subirse al podio. Tal es el caso de Nairo Quintana (Arkéa-Samsic): “A Nairo se le ve bien y con mucha confianza. Aunque hubo uno que otro día que ha estado como él quisiera, confía en que lo hará muy bien en los Pirineos y cree que está listo para asaltar el podio”, confesó el exciclista español, luego de haber conversado con el colombiano.

De cara a lo que se viene para el pelotón en la tercera semana, Contador se mostró entusiasmado. Aunque la etapa 16 no será de alta montaña, “puede ser muy interesante con varias dificultades montañosas, lo cual puede hacer que la fuga se seleccione. Habrá quienes quieran luchar por la etapa y equipos que quieran meter corredores adelante, y en la que creo Pogačar tiene que intentar probar a Vingegaard y medirse en un cara a cara”, concluyó Contador.

Los Pirineos calentarán la tercera semana del Tour de Francia. La etapa 16 entre Carcassone y Foix, un recorrido de 179 kilómetros, exigirá bastante a los ciclistas, principalmente en los puertos de Port de Lers (11,4 kilómetros al 7 %) y el exigente Mur de Péguère (9,3 kilómetros al 7,9 %), por lo que los favoritos deberán estar atentos a cualquier movimiento que se presente para no quedar rezagados y perder las chances de pelear por el podio.