La principal sorpresa en la etapa 2 del Tour de Francia 2021 fue un ataque de Nairo Quintana cuando faltaban 1,3 kilómetros para la meta, en pleno ascenso al Muro de Bretaña.

El colombiano saltó del grupo en una explosiva escalada que no es su especialidad, pero alcanzó a generar pánico en el pelotón de favoritos, incluyendo a Mathieu van der Poel, ganador en la jornada.

Al final de la jornada en la que se impuso Mathieu van der Poel, Nairo contó el motivo de su ofensiva, manifestando que “cada vez estoy mejor”.

“Tenía buenas sensaciones. Lo intenté porque vi una apertura y quise aprovecharla. Pero Mathieu van der Poel controló muy bien. Siento que cada vez estoy mejor”, dijo Nairo sobre su ofensiva.

El boyacense es 14 de la clasificación general a solo 26 segundos del líder y a 13 segundos de Tadej Pogačar, que es el favorito mejor ubicado en la carrera hasta ahora.

Nairo había expresado que su objetivo en esta carrera no iba a ser la clasificación general, como es tradicional, sino que iba a apuntar a conseguir victorias de etapa así como la camiseta de los puntos rojos de la clasificación de la montaña.

A pesar de su buena forma y que no ha perdido tiempo como los favoritos Geraint Thomas, Miguel Ángel López o Richie Porte, antes de la etapa Nairo se sostuvo en que su intención no es buscar el podio ni la camiseta amarilla, sino que habrá un día en el que pierda tiempo para poder meterse en las fugas y luchar por el triunfo.

Victoria para Van der Poel

Mathieu van der Poel se impuso en la segunda etapa del Tour de Francia, este domingo, tras la llegada en el Mûr-de-Bretagne, donde se vistió con el maillot amarillo de líder de la clasificación general.

El joven neerlandés de 26 años, que participa por primera vez en la ‘Grande Boucle’, arrebató al francés Julian Alaphilippe el maillot amarillo, una prenda que nunca pudo lucir su ilustre abuelo Raymond Poulidor.

Van der Poel batió por 6 segundos a los favoritos eslovenos del Tour, el campeón, Tadej Pogačar, y el segundo del año pasado, Primož Roglič.

“He pensado, está claro, en mi abuelo al llegar a la meta”, reaccionó el neerlandés, con los ojos llorosos y el rostro entre las manos, recordando al excampeón francés, fallecido en noviembre de 2019.

Para hacerse con el ‘maillot’ símbolo del Tour, el neerlandés atacó en dos ocasiones. La primera para hacerse con los 8 segundos de bonificación en la cima de la primera subida del puerto de Ménéhiez, el ascenso all Mûr-de-Bretagne. La segunda vez para ganar la etapa.

Cuádruple campeón del mundo de ciclo-cross, Van der Poel brilla en disciplinas diferentes, tanto en ruta, ganando clásicas, como en bicicleta de montaña cross-country, la disciplina en la que buscará el oro en los Juegos de Tokio.

Un día después de las caídas de la primera jornada, la escapada de este domingo (Perez, Theuns, Clarke, Koch, Schelling, Cabot) fue lanzada en la primera media hora de carrera. Entre sol y lluvias, el belga Edward Theuns y el francés Jérémy Cabot continuaron la aventura en los 70 últimos kilómetros, pero el pelotón remontó antes del primer ascenso del Mûr-de-Bretagne, a la entrada de los 20 kilómetros finales.

En la general, Van der Poel tiene 8 segundos de ventaja sobre Alaphilippe, quinto en la etapa. Pogačar, tercero, está a 13 segundos, delante de Roglič, cuarto a 14.

El lunes, los esprínteres tendrán por primera vez una etapa adaptada a sus características, la tercera, de 182,9 kilómetros, entre Lorient y Pontivy, en la penúltima jornada en Bretaña.