Rigoberto Urán fue el gran damnificado del primer final en alto de los Pirineos en el Tour de Francia en el Col de Portet que fue el puerto final de la etapa 17 de la carrera.
El colombiano no pudo resistir los ataques de Tadej Pogacar y se descolgó del grupo de favoritos conformado por el esloveno junto con Jonas Vingergaard y Richard Carapaz.
El colombiano perdió 1′49′' con el esloveno, que lo soltó con un ataque a falta de 8 kilómetros y luego su impuso a su compañeros de travesía en la meta.
En la clasificación general, Rigoberto quedó a 7′17′' de Pogacar y cayó al séptimo puesto. Las pérdidas de Urán pudieron haber sido mucho peores pero contó con la ayuda de su compañero y compatriota Sergio Higuita, quien lo ayudó a ir a ritmo en los últimos kilómetros.
Al final de la jornada siguieron las malas noticias para el antioqueño que fue sancionado y multado por los jueces de carrera por dos violaciones al reglamento.
El primer castigo para Rigo fue por lanzar un bidón en una zona prohibida por lo que recibió una multa de 500 francos suizos que equivalen a 2′067.921 en pesos colombianos.
La nueva reglamentación de la UCI considera esto una violación grave y hasta corredores han sido expulsados de carreras antes en el año por este motivo.
Sin embargo, luego modificaron el reglamento y tras la primera infracción se que hace una advertencia y luego puede venir la expulsión. Sin embargo sí le quitaron 25 puntos al colombiano en el ranking UCI como castigo.
El líder del EF también recibió una sanción por orinar en frente del público por lo que fue multado con 200 francos suizos, 827.168 en pesos colombianos.
La reacción de Rigo a la etapa
Rigoberto se refirió a la difícil jornada en la que se escalaron dos puertos de primera categoría y otro de fuera de categoría en un video publicado en la cuenta de Go Rigo Go.
El antioqueño reconoció que sufrió y agradeció la ayuda de su compañero y compatriota Sergio Higuita, que cuando desfalleció estuvo para ponerle paso y evitar que la pérdida de tiempo hubiera sido peor.
“Hoy, sobre todo al final, me tocó apretar mucho, iba sufriendo; afortunadamente por ahí estaba Sergio Higuita que me ayudó bastante, hizo un trabajo fenomenal. No se perdió tanto tiempo como yo esperaba”, dijo Rigo.
A pesar de su sufrimiento en el día, Rigo se mostró optimista y hasta sonrió manifestando que “la fe es lo último que se pierde” en la charla con el periodista Juan Charry mientras estaba en el vehículo del equipo.
“Obviamente, es mucho lo que se perdió hoy, pero mañana es otra etapa dura. Hay que recuperarnos bien y tratar de estar bien para la crono. La carretera lo pone a uno en el lugar en donde tiene que estar, hoy nos reventaron los primeros, pero vamos a darle estos días. La fe es lo último que se pierde, estamos con el equipo bien y vamos a ver qué pasa”, agregó el capo del Education First.
“Estamos trabajando, estamos con el equipo bien. Mañana dura y el sábado la crono. Todavía quedan dos días importantes, alimentación y a dormir bien”, concluyó el ciclista.
Para poder aspirar al podio, Urán necesitará recortar al menos 30 segundos con el corredor del Ineos en la etapa 18 y luego más de un minuto en la contrarreloj.
En la primera contrarreloj que fue en la etapa 5, Rigo le sacó 36 segundos al ecuatoriano, por lo que pensar en una ventaja de un minuto no es descabellado teniendo en cuenta el buen desempeño del colombiano.
Mientras que con Vingegaard la tarea será mucho más complicada porque el danés fue tercero en la primera crono y le sacó 41 segundos de ventaja a Rigo.
Aunque Rigoberto no se caracteriza por atacar, sí podría intentar algún movimiento el jueves, teniendo en cuenta que tiene ventaja de 17 segundos con Ben O’Connor, quinto de la general pero quien en la primera contrarreloj cedió 48 segundos con el colombiano.