La Organización Mundial de la Salud (OMS) explica que alimentar exclusivamente con leche materna a los bebés durante sus primeros seis meses de vida tiene un gran impacto en la salud a largo plazo del niño, desde reducir el riesgo de contraer infecciones hasta prevenir la obesidad en la infancia. Sin embargo, muchas madres por diferentes razones no pueden amamantar directamente y recurren a la extracción de leche materna, un proceso que requiere un gran esfuerzo y dedicación. Por ello, desde el 2017 se celebra el Día Mundial de la Extracción de Leche Materna el 27 de enero.
Aunque es común escuchar que hay ciertos alimentos que ayudan a producir más leche, la verdad es que no hay evidencia científica que respalde esta afirmación. Ni el hinojo, ni el agua de panela, ni la cebada, ni el caldo de pollo o la cerveza van a hacer que una madre produzca más leche, según la Oficina para la Salud de la Mujer. Igualmente, es incorrecto afirmar que el tamaño de los pechos afecta la producción de leche.
La cantidad de leche que se produce realmente depende de otros factores como la succión del bebé y la hidratación de la madre. Cabe resaltar que la alimentación sí es importante durante este periodo por el hecho de que la leche materna es un reflejo directo de los hábitos alimenticios de la madre. De hecho, un estudio del European Journal of Clinical Nutrition demostró que los niños aceptan e incluyen más variedad de alimentos si la madre tuvo una alimentación variada durante el periodo de lactancia.
Teniendo en cuenta lo anterior, organizaciones e instituciones como Mayo Clinic, la OMS y la OASH dan las siguientes recomendaciones tanto para lactar de manera adecuada como para mantener la salud de la madre durante la lactancia:
Aumentar el consumo de calorías
Durante la lactancia es necesario aumentar el consumo de calorías -entre 300 y 400 adicionales diariamente- para suplir las usadas durante la producción de la leche. Para obtener estas calorías adicionales es ideal recurrir a alimentos ricos en nutrientes, como una rebanada de pan integral con una cucharada de mantequilla de maní, un plátano o una manzana o yogurt natural o griego.
A continuación, una receta que incluye estos ingredientes para hacer un snack nutritivo para la lactancia:
- 2 manzanas
- Canela en polvo
- Al gusto: yogur griego, frutos secos y miel.
Preparación: ver video.
Variar el menú durante la lactancia
Añadir alimentos ricos en proteínas, como carnes magras, huevos, lácteos, frijoles, lentejas y mariscos con bajo contenido de mercurio es ideal durante el proceso de lactancia. Además, no hay que olvidar añadir cereales integrales, frutas y verduras. Como se mencionó anteriormente, comer alimentos variados durante la lactancia cambia el sabor de la leche materna. Esto expone al bebé a distintos sabores y puede ayudarle a aceptar alimentos sólidos con mayor facilidad más adelante.
Lo más importante es la hidratación
Lo ideal es tomar agua lo más constantemente posible, no hay una cantidad específica de agua. En general, se sabe que no se ha consumido suficiente agua cuando se sienta sed o cuando la orina tiene un color muy amarillo. Además, es recomendable evitar bebidas con alto nivel de azúcar, cafeína o alcohol.