La linaza es la semilla de la planta de lino y aporta al organismo fibra soluble e insoluble, cobre, fósforo, magnesio, manganeso, omega 3 y 6 y vitaminas B1, B2 y B6. Adicionalmente es una gran fuente de ácido graso poliinsaturado: ácido alfa-linolénico (ALA) y de lignanos, un fitoestrógeno. Por cada cucharada (7 gramos) de semillas de linaza hay 2 gramos de ácidos grasos poliinsaturados, 2 gramos de fibra dietética y 37 calorías. No solo es un gran alimento sino que también favorece la pérdida de peso, entre otros beneficios.
Beneficios de la linaza
- Esta semilla promueve el tránsito intestinal gracias a que es una gran fuente de fibra soluble, que ayuda a mantener el tracto digestivo libre y favorece la pérdida de peso. Esto también la hace un laxante muy efectivo.
- Es un alimento que ayuda a prevenir enfermedades cardiacas gracias a que contiene el ALA. Este ácido graso poliinsaturado ayuda a reducir la presión arterial.
- Ayuda a reducir el nivel de azúcar y colesterol gracias a su alto nivel de fibra dietética.
- Según la Arthritis Foundation, esta semilla reduce el dolor y tiene propiedades antiinflamatorias. Gracias a esto puede ayudar a aliviar la artritis reumatoide y el lupus.
- Según el portal Medical News Today, este producto contiene ácidos grasos omega-3, por lo que es un alimento antioxidante que puede ayudar a prevenir la formación de células cancerígenas en el cuerpo.
Formas de preparar la linaza
Aceite de linaza: es una forma de agregar este ingrediente a la dieta y lo recomendable es consumir una cucharada diaria. Puede ser usado como aderezo en ensaladas, en batidos o diluido en agua.
Harina de linaza: la linaza, al ser una semilla, puede ser agregada a preparaciones de pastelería, ya sea en forma de harina o como fruto seco. Adicionalmente, este ingrediente no contiene gluten por lo que los productos de pastelería podrán ser consumidos por personas que sufran la enfermedad celíaca.
Linaza en bebidas: se puede diluir una cucharada de linaza molida en agua o en infusiones. Consumir a diario esta preparación ayuda a bajar de peso gracias a su efecto laxante.
Semillas de linaza como acompañante: se puede agregar una cucharada de semillas de linaza a una taza de yogur, a una porción de fruta o cereal e, incluso, a salsas como la mostaza.