Un perro puede comer  de noche y de día, con hambre o sin ella. Por eso, es necesario tener en cuenta qué come y enseñarle a que lo que debe comer es lo que tú le das en la casa. No permitas que quiera alimentarse con todo lo que ve, tú puedes ayudar a frenar esta situación. ¿Cómo?  Así... Dale comida en determinados horarios: Lo mejor que puedes hacer es poner horarios de alimentación. Te caería muy bien darle comida antes de ir de paseo, así cuando salga estará llenito.No le permitas que se acerque a la basura o a lugares en los que se concentra alimento de dudosa procedencia: Para lograr esto, debes llevarlo atado a una correa para que puedas controlar lo que hace, cuando camina suelto es difícil controlar sus movimientos o frenar su comportamiento. El perro puede comer algo que le haga mal o lo envenenen sin que te des cuenta o alcances a detenerlo.Siempre NO: Utiliza patrones de educación. Cuando lo veas mover su hocico hacia un alimento o lugar donde haya residuos, inmediatamente dile NO y retíralo para que él  no vaya a correr riesgos.Llévalo siempre con correa: De esta manera podrás supervisar cómo se está comportando. Es la mejor manera de parar a tiempo cualquier intención de comer lo que encuentra. Cuando salgas a pasear con él y él se vaya a comer algo, siempre dile en tono enérgico que no. Cuando termines el paseo debes premiarlo si ha tenido un comportamiento correcto, así lo repetirá.