El Fondo define la garantía como el “acto jurídico accesorio que se deriva de una obligación principal de un deudor frente a un intermediario, mediante el cual el FNG se obliga a pagar total o parcialmente la obligación garantizada ante el incumplimiento del deudor”. Los beneficiarios de las líneas del Fondo Nacional de Garantías (FNG) pueden ser personas naturales o jurídicas; mipymes y grandes empresas, con domicilio en Colombia, de cualquier sector de la economía. La persona o empresa interesada en acceder a un crédito debe solicitarlo ante un banco, que realizará el estudio técnico y financiero y, una vez revisado esto, hará la solicitud ante el FNG, que envía la garantía al banco para que pueda desembolsar el préstamo. El usuario no debe hacer ningún trámite ante el Fondo. Este proceso se maneja internamente entre el intermediario financiero y la entidad del Estado. Lea también: Las 20 líneas de crédito del Gobierno para empresas durante la crisis “El valor máximo por deudor definido por el FNG es de $4.000 millones en valor garantía en caso de ser mipyme. El VMD por deudor gran empresa será el equivalente al 90% del 12% de los ingresos al corte del 31 de diciembre de 2019, máximo hasta $80.000 millones en valor de garantía”, explicó el FNG. Una de las aclaraciones que hace la entidad es que no es necesario tener una empresa constituida formalmente para acceder a la garantía, ya que puede ir dirigida a personas naturales. Así mismo, es posible tener varios créditos con diferentes intermediarios financieros utilizando la garantía, siempre y cuando no exceda el cupo asignado por el FNG para cada crédito garantizado. Lea también: Se han desembolsado $4,9 billones de las líneas del FNG El FNG indicó que ha fortalecido el programa especial de garantías Unidos por Colombia, mediante el incremento de la cobertura hasta el 80% en los productos para capital de trabajo, “para que las micro, pequeñas y medianas empresas del país puedan atender sus necesidades”. Dependiendo del monto de la garantía, el Fondo entrará a cubrir el crédito en caso de que no cumpla con los pagos quien lo haya tomado. La garantía puede ir desde 60% hasta 90%, dependiendo de la línea.