Con la ayuda de un cuchillo, abra los filetes de pechuga; estos deben quedar de ½ centímetro de grosor, aproximadamente. Condimente con mostaza, sal y pimienta. Aparte, en un recipiente ponga las achiras molidas, y en otro los huevos batidos con el agua. Pase cada trozo de pollo por el huevo y luego por las achiras, haciendo presión para que se peguen bien a la carne. Para que queden más crocantes, repita la operación. Lleve los pollos a la nevera durante mínimo 1 hora, deben guardarse separados, no montados el uno sobre el otro, con el fin de fijar el apanado. Precaliente el horno a 180 °C. En una bandeja con papel mantequilla o tapete de silicona ponga cada pechuga de pollo. Vierta encima un poco de aceite de oliva y hornee hasta que doren. Lo ideal es darle la vuelta a los 10 o 12 minutos para que quede pareja la cocción. Si quedaron grasosas, escurra en papel absorbente antes de usar. Mezcle la mostaza con la miel y reserve. Arme los sándwiches de la siguiente manera: abra el pan con un cuchillo de sierra y unte la tapa con mantequilla y la base con mayonesa. Luego ponga las lechugas previamente lavadas y escurridas, los tomates cortados en rodajas, el queso intercalado y finalice con las pechugas cocinadas. Acompañe con la salsa de miel y mostaza.

* RECETA Tiempo de Preparación: 13 Número de Personas: 4 Ingredientes: 4 filetes de pechuga de pollo sin piel 2 tazas de achiras trituradas 2 huevos ¼ de taza de agua 3 cucharadas de mostaza antigua 4 cucharadas de aceite de oliva Sal y pimienta al gusto 1 baguette o pan campesino artesanal 4 cucharadas de mantequilla fundida 3 cucharadas de mayonesa 2 tomates maduros 2 cogollos de lechuga 6 láminas de queso holandés 6 láminas de queso mozzarella 1 taza de miel de abejas 3 cucharadas de mostaza Dijon