Ninguna persona está exenta de sufrir una caída por cuenta de un resbalón. Hay zapatos que tienen la suela tan lisa que es posible que resbalen en pisos secos o húmedos. Con la lluvia es más posible que esta situación se presente.

El portal Hogarmanía indica que hay diferentes razones detrás de esta situación. La primera son los suelos mojados o húmedos, además que hay otros que por naturaleza pueden facilitar que los zapatos deslicen.

Otra causa para que esto ocurra es el desgaste de la suela. De igual forma, cualquier suela que no sea de goma es propensa a resbalar, especialmente cuando el calzado es nuevo. En el calzado nuevo esta situación se presenta con más frecuencia.

Por ello es importante tomar acciones que ayuden a prevenir momentos desafortunados e incluso que pueda presentarse alguna fractura por cuenta de un mal golpe. Hay zapatos que son más propensos que otros a que se presente esa situación y por ello recurrir a trucos caseros puede ser una decisión ganadora. Estas son algunas de las estrategias de las que se puede “echar mano”.

Hay zapatos que pueden tener suelas que tienden a deslizarse. | Foto: Getty Images

Limar la suela: Si los zapatos son nuevos o tienen la suela lisa y sin dibujos, una opción es limarla. Este truco es efectivo porque con la lima se forma porosidad o finas ranuras que impiden que el zapato resbale con facilidad.

Restregar una papa cortada en la suela: Se dice que este truco no falla. Para evitar que los zapatos resbalen, se corta una papa por la mitad y se restriega por la suela de los zapatos o botas. El almidón de este alimento crea una capa antideslizante que permitirá caminar con más soltura por entornos mojados o suelos resbaladizos, sin enfrentar mayores riesgos.

Utilizar laca para el pelo: Además de aplicarla en el cabello, la laca ayuda a evitar resbalones en la lluvia, debido a que este producto es antiadherente. Por eso, si se tiene en casa se puede rociar la suela de los zapatos con ella. Después, se deja que se sequen. Una vez pasado este tiempo, dejarán de resbalarse y facilitarán caminar con mayor tranquilidad.

Con zapatos de suela lisa se corre el riesgo de resbalarse. | Foto: Getty Images

Silicona caliente: La silicona no es ideal para un zapato que se lleve a la calle, porque terminaría cayéndose con el roce del pavimento. Sin embargo, si es viable usarla para el calzado de casa. Se aplica este producto con una pistola y se deja secar para que se adhiera al zapato y de esta forma se evitará que resbale.

Recubrir la suela: Si estos trucos no parecen suficientes o no convencen, en este caso lo mejor es acudir a un profesional para que coloque una fina capa de goma sobre la suela de tus zapatos. Este arreglo es barato, y se le puede pedir a cualquier zapatero. Esto brindará mayor tranquilidad a la hora de salir a la calle y más en épocas de lluvia.