Las llantas son un elemento esencial para el funcionamiento de cualquier vehículo y de su estado depende gran parte de la seguridad que el automotor pueda ofrecer, ya sea para evitar accidentes o para que estos resulten lo menos desastrosos posible.

Cabe señalar que en el mercado existen diferentes marcas de neumáticos, las cuales ofrecen distintas referencias que contemplas una infinidad de variables: alto rendimiento, larga duración, aptas para varios tipos de terreno, mayor adherencia; en fin, están diseñadas para las diferentes exigencias que un conductor le puede hacer a su carro.

Pese a esto, y a que según el tipo de vehículo se escogerán las que mejor se adapten a sus necesidades, hay algunos aspectos básicos que ayudan a cuidar los neumáticos y a alargar su tiempo de duración, lo que además de significar seguridad para el conductor y sus pasajeros, también resulta ser un alivio para el bolsillo.

Es bueno someter los neumáticos a revisiones periódicas para garantizar su buen estado. | Foto: Getty Images

¿Cómo alargar la vida útil de las llantas?

Los siguientes son algunos consejos que ayudarán a mantener en buen estado los neumáticos:

  • Revisar la presión del aire: salir a rodar con la presión de aire indicada permitirá que las llantas tengan un desgaste parejo; además, ayudará al vehículo a ahorrar combustible, pues una presión baja hará que el carro requiera más potencia para moverse. Si se da una situación contraria, con llantas por encima de la presión, estas podrían estallarse mucho más fácil.
  • Vencimiento de los neumáticos: como casi todo elemento, las llantas tienen un tiempo de vida útil que va más allá del estado físico, así que hay que tener en cuenta la fecha de fabricación y la fecha de vencimiento para saber si deben ser cambiadas o si siguen aportando la misma seguridad.
  • Rotación de neumáticos: este es un punto clave, pues permitirá que los neumáticos pasen por las cuatro posiciones del vehículo y que tengan un desgaste parejo por ambas caras de la llanta. El servicio técnico le indicará el orden en el que se debe realizar y cada cuánto hay que hacerlo.
El balanceo es el proceso mediante el que se equilibra el peso de las llantas y de los rines. | Foto: Getty Images
  • Controlar el desgaste con la banda de rodamiento: la banda de rodamiento le indica al conductor o responsable del vehículo qué tanto se han desgastado los neumáticos y si ya es tiempo de realizar una actualización; es clave identificar qué tanto se ha consumido, pues es clave que estas ranuras tengan la profundidad adecuada para que, en condiciones de lluvia, el agua pueda ser evacuada de forma adecuada y evitar que el carro patine sobre el asfalto.
  • Cuidado de los rines: los rines son la estructura de acero sobre la que se sujeta cualquier neumático; por ende, si se encuentran golpeados, rotos o doblados, interferirán directamente sobre el estado de la llanta, permitiendo escape de aire o moliendo el neumático en algún punto. Así que hay que revisar el estado de los rines y rectificarlos o cambiarlos si es necesario.
Se plantea la pregunta sobre cuántos kilómetros puede recorrer una llanta antes de necesitar reemplazarla. | Foto: Getty Images
  • Llantas estalladas: este es un problema que se da con más frecuencia en cierto tipo de carros debido al perfil y al rin que utilizan; sin embargo, si esto sucede, lo indicado es cambiarla y no repararla, pues surge la posibilidad de que se vuelva a dañar en el mismo sitio y provoque una emergencia; hay marcas que ofrecen garantía por este tipo de situaciones y cambian el neumático siempre y cuando no haya sido vulcanizado.