La Cuna de Moisés es una planta perenne herbácea, originaria de México, América tropical, Malasia y oeste del Pacífico.
Sin embargo, esta planta de flores blancas, con el paso del tiempo se expandió a otros lugares del mundo.
Según el sistema filosófico chino de origen taoísta, el Feng Shui, esta planta tiene poderes energéticos que influyen positivamente en el ambiente del hogar donde la tienen.
De hecho, la cuna de Moisés está asociada con la inocencia y la pureza tanto del alma, como del entorno que te rodea. Además, desde el Feng Shui aseguran que tener esta planta ayuda a alejar la energía negativa en los hogares.
Para que esta planta esté sana, factor clave para que florezca constantemente, es clave que esté ubicada una buena iluminación, pero de forma indirecta.
Sin embargo, en ocasiones necesita un poco de ayuda para estimular la floración y para ello solo basta con acudir a un abono casero. Para ello, tan solo se necesita 1 taza de garbanzos cocidos, azúcar y tres cáscaras de plátano.
Procedimiento:
- Cortar las cáscaras de plátano en pequeños trozos y luego agregarlos a una licuadora junto a los garbanzos.
- Posteriormente, agregar una cucharada de azúcar, junto a un litro de agua.
- Después, poner a licuar todo lo anterior hasta obtener una mezcla homogénea.
- Acto seguido, se cuela el abono y se mezcla una parte con otras tres de agua.
- Por último, aplicar el abono a la cuna de moisés una vez al mes.
¿Dónde se debe ubicar el romero para que florezca?
El romero es un arbusto aromático procedente de las costas rocosas del Mediterráneo y del Cáucaso.
Esta planta es utilizada desde épocas antiguas como condimento y con fines medicinales, teniendo en cuenta las múltiples propiedades que le atribuyen.
No obstante, esta planta fue utilizada como una planta mágica para combatir la brujería, el mal ojo o quitar la envidia, así como purificar el ambiente de enfermedades.
En cuanto a los activos del romero, los expertos en plantas recuerdan que se concentran en las hojas y, en ocasiones, en las flores.
En tal sentido, para que el romero se mantenga en buen estado y por ende florezca, este se debe ubicar en un espacio que le dé luz directa del sol, pero que no quede expuesto al viento. Así mismo, se debe tener en cuenta que esta planta se debe plantar en terrenos secos, no muy regados.
De tal modo, es clave que al momento del riego, esta planta no quede empapada con charcos, puesto que el romero no tolera mucho la humedad.
Afirman que las mayores temporada en la que el romero necesita agua, es durante el crecimiento y la floración.