Con las épocas de frío es común que se vuelva necesario lavar con mayor frecuencia las cobijas, sin embargo, hay que tener en cuenta ciertos cuidados para no afectar las fibras de las mantas ni desperdiciar recursos en el intento.
Para ahorrar tiempo y dinero, una opción es lavarlas en casa de manera eficaz, evitando que se desgasten.
Prepare las cobijas antes de ponerlas en la lavadora
Lo más común es que una vez que las mantas se comienzan a manchar sin pensarlo dos veces se llevan a la lavadora. Sin embargo, si se quiere mantener en buen estado, es necesario tener en cuenta algunos consejos previos al lavado.
Es clave fijarse siempre en las indicaciones que se encuentran en la etiqueta de fabricación para saber con seguridad que sí se pueden lavar en máquina y que el tamaño de la manta no será un inconveniente.
- Tenga en cuenta el material de la manta
El material del que está compuesta la manta es una de las características principales que se deben considerar antes de lavarlas, pues dependiendo de este aspecto, se sabrá en que ciclo se debe colocar la lavadora para que no se dañen las fibras.
Por ejemplo, las mantas de lana o polares pueden lavarse en la lavadora con un programa suave, en cambio las mantas de pelo es recomendable lavarlas a mano.
- El tamaño de la manta
El tamaño de la manta también es importante a la hora de tener en cuenta el lavado. De esto dependerá si es posible lavar en casa una cobija o si debe recurrir al lavado industrial. Nunca force las cobijas, pues debe tener en cuenta que en el momento en el que se mojen su peso aumentará considerablemente.
Paso a paso para lavar una cobija en casa:
- Introduzca la manta en la lavadora después de que haya verificado que el tamaño es el adecuado.
- Elija un programa corto, especial para prendas delicadas y con una temperatura de agua fría (máximo 30 ºC).
- Añada a la lavadora detergente en polvo o líquido para prendas delicadas para que así se mantengan con la textura y colores originales.
- Evite añadir suavizantes. En caso de las mantas de lana puedes utilizar un cuarto de taza de vinagre blanco por lavado a fin de eliminar los malos olores y mantener la suavidad.
Un consejo extra para evitar estar lavando frecuentemente las cobijas es cepillarlas una vez por semana, con el fin de quitar motas y pelusas. Si tiene mascotas, este truco le ayudará a que su manta no se impregne de pelo que pueden dañar el buen funcionamiento de su lavadora.