Lavar la ropa deportiva de manera adecuada es la clave para mantenerla fresca y libre de bacterias. En ese sentido, existen varias recomendaciones para hacerlo. A continuación, algunas de ellas.

Separar la ropa: Separar la ropa deportiva de otros tipos de ropa ayuda a evitar la transferencia de olores y bacterias.

Voltear las prendas al revés: Esto ayuda a proteger los estampados y materiales sensibles durante el lavado.

Usar agua fría: El agua caliente puede dañar las fibras y elásticos de la ropa deportiva. Por ello, lavar con agua fría para preservar la calidad de las telas.

Utilizar detergente suave: Elegir un detergente suave y libre de fragancias fuertes permite evitar irritaciones en la piel y mantener la transpirabilidad de la tela.

Lavar la ropa deportiva de manera adecuada es la clave para mantenerla fresca y libre de bacterias. | Foto: Getty Images

No usar suavizante de telas: El suavizante puede dejar residuos en la tela y disminuir su capacidad para absorber la humedad. Por lo anterior, se debe optar por productos sin suavizante.

Lavar a mano o en ciclo suave: Si es posible, puede lavar a mano tu ropa deportiva o utilizar el ciclo suave de la lavadora para evitar el desgaste excesivo.

Secar al aire libre: Evitar usar la secadora, ya que el calor puede dañar las fibras elásticas. En su lugar, colgar la ropa deportiva para que se seque al aire libre.

No dejar la ropa húmeda por mucho tiempo: Si no puede secar la ropa de inmediato, se debe colgar en un lugar ventilado para evitar la proliferación de bacterias.

Lavar regularmente: Aunque no use la ropa deportiva todos los días, es importante lavarla regularmente para eliminar el sudor y las bacterias que pueden acumularse con el tiempo.

Remojar la ropa puede convertirse en un paso fundamental antes de lavarla por completo. | Foto: SilviaJansen

Prendas que no se deben echar a la lavadora

Trajes: lo ideal es que este tipo de vestuarios sean lavados en un sitio especializado, como la tintorería, ya que se pueden llegar a rasgar o encoger, cambiando su tamaño original de manera notable. En cuanto a las arrugas, solo necesitará una planchada a vapor, para prevenir quemaduras en el atuendo.

Prendas con brillos y adornos cosidos: este tipo de vestuario, que incluyan encajes o lentejuelas, deben estar prohibidos para ser lavados en lavadora. Lo ideal es que sean lavados a mano para evitar que puedan estropearse o perder los adornos brillantes por la fuerza del electrodoméstico.

Trajes o vestidos de baño: sin duda, estas son una de las prendas más delicadas que existen, por ello es importante hacer el respectivo lavado con agua templada y a mano; así se evita que se deformen o se encojan. Recuerde secarlo al aire libre y a la sombra.

Cortinas: especialmente cuando son pesadas, no deben ser lavadas en lavadora porque suelen absorber todo el agua y podrían dañar el electrodoméstico. A su vez, lo ideal es no meter cortinas con aros metálicos, forros, pliegues o cosidos, encajes delicados, ya que podrían dañarse o encogerse. Por el contrario, las que son de algún tejido sintético, no habría problema en meterlas en la lavadora.