El ser humano cuida de gran manera la apariencia de sus aparatos electrónicos que se encuentran en el hogar. Dentro de estos elementos, en los últimos años los teléfonos celulares han tomado una gran relevancia.
Para muchos no solo es clave el funcionamiento de estos elementos, sino también su apariencia, escogiendo algunos modelos en específico que sean atractivos a la vista y adornándolos con ciertos objetos adicionales.
Un ejemplo de esto, es la funda del celular, un objeto que puede funcionar para la protección del celular frente a los golpes o a la suciedad, pero que también es preferido por sus dibujos, patrones, fotografías o colores.
Sin embargo, al ser una especie de protector para estos dispositivos, suele verse expuesto de manera excesiva a elementos que dañen su aspecto, como la suciedad, que puede darle un color amarillento a su apariencia, especialmente si esta es transparente o blanca.
Muchas personas optan por desechar estos protectores al ver la apariencia amarillenta que han tomado, sin embargo, existen soluciones o remedios caseros que permiten desmanchar estos protectores, alargando su tiempo de uso.
¿Cómo solucionarlo?
Algunos elementos que están a fácil alcance, pueden funcionar.
Dos los elementos que permiten solucionar estos daños son el bicarbonato de sodio y el vinagre, los cuales, a partir de una mezcla, son capaces de desmanchar distintos objetos.
Para esto también se debe contar con un poco de jugo de limón, así como de un cepillo de dientes.
En primer lugar, se recomienda mezclar estos ingredientes hasta formar una pasta, la cual, según explica el portal, Xataka Android, puede ser aplicada gracias al cepillo de dientes, el cual permitirá alcanzar cualquier rincón de la funda protectora.
Luego de haber realizado esta aplicación, se recomienda dejar el protector en un recipiente, donde se añadirá más vinagre, y se dejará actuar por una hora, para luego limpiarlo.
Otros elementos que pueden servir ante estos daños, según el mismo sitio web mencionado con anterioridad, son la pasta de dientes, el jabón para platos, la sal, el cloro, o incluso el agua oxigenada.
De esta manera, se recomienda utilizar este tipo de métodos que pueden resultar efectivos antes de desechar dichas fundas. Por otro lado, es importante evitar que estas mezclas o preparaciones puntuales entren en contacto excesivamente con la piel humana, ya que a partir de esto, se podría generar una reacción alérgica o de mayor afectación en estos tejidos.