En los últimos años, la preocupación por el bienestar animal ha cobrado una gran relevancia en diversas industrias, especialmente en la cosmética. Los consumidores se han vuelto más conscientes de las implicaciones éticas de sus decisiones de compra, lo que ha llevado a un creciente interés por conocer si los productos de maquillaje que adquieren son libres de crueldad animal.
La industria del maquillaje, tradicionalmente vinculada a pruebas en animales, ha sido objeto de un cambio gradual hacia prácticas más responsables y respetuosas con los animales, impulsado por la demanda de productos que no impliquen sufrimiento para seres vivos. Sin embargo, la abundancia de afirmaciones de marcas sobre ser “libres de crueldad animal” ha generado confusión, ya que no todas estas declaraciones están respaldadas por prácticas éticas claras ni verificables.
Determinar si una marca de maquillaje realmente es libre de crueldad animal requiere de un análisis minucioso, pues no basta con confiar en términos vagos o generalidades. Es necesario entender los diferentes aspectos que abarcan las pruebas en animales y cómo las marcas implementan políticas para garantizar la no experimentación.
Además, las certificaciones externas y la transparencia en las prácticas comerciales son factores clave para identificar productos que respetan los derechos de los animales.
1. Entender el testeo en animales en la industria cosmética
El testeo en animales es un proceso en el que los productos cosméticos o sus ingredientes son aplicados a animales, generalmente roedores o conejos, para observar posibles reacciones o efectos secundarios.
Estas pruebas, que han sido utilizadas durante siglos, buscan garantizar la seguridad de los productos para los seres humanos. Sin embargo, hoy en día existen métodos alternativos para comprobar la seguridad de los cosméticos que no implican sufrimiento animal.
2. Identificar las certificaciones y sellos
Una de las formas más fáciles de saber si una marca de maquillaje realiza pruebas en animales es buscar sellos y certificaciones en sus productos o en su página web.
Las certificaciones de marcas que no testean en animales son una indicación clara de que la marca se compromete con el bienestar animal. Algunas de las organizaciones más reconocidas son:
- Cruelty-Free International (Leaping Bunny): Este es uno de los sellos más reconocidos a nivel mundial. Las marcas que ostentan este símbolo garantizan que no realizan pruebas en animales, ni tampoco lo hacen sus proveedores ni terceros.
Este sello también asegura que la marca ha sido sometida a una auditoría para verificar que no testean en animales.
- PETA (People for the Ethical Treatment of Animals): PETA también ofrece un sello “Cruelty-Free” a las marcas que no realizan pruebas en animales.
A diferencia del sello Leaping Bunny, PETA no realiza auditorías físicas, pero las marcas deben proporcionar evidencia de que no están involucradas en pruebas en animales.
- The Vegan Society: Aunque este sello está más relacionado con el veganismo, muchas marcas que son 100% veganas también son libres de crueldad. Sin embargo, no todas las marcas que no testean en animales son veganas, ya que algunas pueden usar ingredientes de origen animal sin realizar pruebas en ellos.
Es importante revisar estos sellos en el empaque de los productos o en el sitio web de la marca para obtener una indicación confiable de sus prácticas.
3. Investigar las políticas de la marca
Muchas marcas de cosméticos tienen políticas publicadas sobre el testeo en animales en sus sitios web. Si una marca no tiene información clara al respecto, esto podría ser una señal de alerta. Es recomendable leer detenidamente las secciones de “Sobre nosotros” o “Compromiso con la ética” de la página web, donde las marcas suelen especificar su postura frente a las pruebas en animales.
Además, algunas marcas hacen explícito que sus productos no son probados en animales, pero podrían hacer excepciones si se venden en países donde las pruebas en animales son requeridas por ley.
Esto ocurre principalmente en mercados como China, donde las autoridades exigen que los cosméticos importados sean sometidos a pruebas en animales antes de ser comercializados. Es importante verificar si la marca realiza ventas en estos países y si esta práctica es parte de su política.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de Semana.