El atún en lata es uno de los alimentos más populares. Es muy frecuente conseguirlo en las alacenas de todos los hogares, gracias a su versatilidad y practicidad, pues es viable consumirlo en diversas preparaciones y en diferentes momentos del día.
Se trata de uno de los pescados grasos más consumidos en el mundo y se dice que es buena fuente de vitaminas como la B2, B3, B6 y B9, además de la A y la D. Así mismo, aporta minerales como fósforo, magnesio, hierro y yodo, entre otros.
Una de las bondades que se le atribuyen a este tipo de alimento es que es rico en ácidos omega-3, un tipo de grasa poliinsaturada que ayuda a reducir los niveles de colesterol y de triglicéridos, dos lípidos que si se acumulan en la sangre pueden causar diversas afecciones de salud.
De igual forma, ayudaría a fluidificar la sangre, disminuyendo así el riesgo de afecciones relacionadas con el corazón.
Sin embargo, es importante prestar atención a la forma en que se consume, las veces que se ingiere en la semana y cómo conservarlo después de que se ha abierto la lata. Los expertos aseguran que es mejor consumir este alimento cuando viene en presentación en agua.
Las personas consumen atún no solo para calmar el hambre, ya que es un producto práctico y de fácil uso, sino que este tipo de pescado favorece algunas condiciones de salud. Debido a que es una importante fuente de proteína es aconsejado para fortalecer la masa muscular, por ejemplo.
Es un alimento que contiene los 10 aminoácidos que el cuerpo requiere para un buen desarrollo celular, para mantener el sistema inmune saludable y para reponer o ganar tejido.
¿Cómo conservarlo?
Normalmente, las personas abren la lata de atún cuando lo van a consumir; sin embargo, existe la posibilidad de que no se utilice todo o por alguna razón, al final no se ingiera. La recomendación es consumir el atún abierto en un plazo máximo de 24 horas si está en lata metálica y de 48 horas si se ha depositado en un envase de plástico o de vidrio y mantenerlo siempre refrigerado.
Para ello, según El Periódico de España, es importante guardar el atún en un recipiente hermético y limpio, cubierto con su propio líquido y sin mezclarlo con otros alimentos, para evitar su contaminación. También es conveniente mantener la nevera a una temperatura entre dos y cuatro grados centígrados y evitar abrir y cerrar la puerta con frecuencia para que este alimento se conserve en una buena condición.
Se debe prestar atención
Cuando se consume mucho atún es conveniente tener en cuenta algunos aspectos que pueden ocasionar efectos secundarios o complicaciones para la salud. Aquí se cuentan el mercurio y la sal. Al respecto, el portal Cocina Fácil de México, indica que se deben evitar estos ingredientes en exceso, debido a que pueden tener efectos en la presión arterial.
Por esta razón, organismos internacionales sugieran que no es recomendable consumir más de dos latas de atún a la semana en personas adultas sanas. La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria estableció que el consumo máximo de mercurio que una persona debe hacer a la semana es de 1,3 microgramos por cada kilogramo de peso.
Por su parte, las embarazadas no deberían consumir atún fresco y deben limitar el de lata a unos 170 gramos semanales, según las recomendaciones de la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA). También los expertos sugieren tener en cuenta el peso de cada persona, para determinar la cantidad de este alimento que debería consumir en la semana.