Hay que resaltar que el limón es un desinfectante natural debido a su contenido de ácido cítrico, el cual tiene propiedades antibacterianas y antifúngicas que pueden ayudar a eliminar gérmenes y bacterias presentes en las superficies de la cocina.

Además, este alimento también tiene propiedades desodorizantes y puede ayudar a eliminar olores no deseados en la cocina como los de los alimentos viejos, la basura o las tuberías.

Trucos efectivos para quitar el mal olor a la esponja de lavar loza | Foto: Getty Images

De igual manera, también es un potente eliminador de manchas y residuos difíciles, como las de grasa sobre las encimeras o los utensilios de cocina, pues la acidez puede ayudar a descomponer y disolver la grasa y otros residuos, facilitando su limpieza.

Lavar la vajilla es muy importante para garantizar la seguridad al momento de comer, pues los platos, vasos, cubiertos y utensilios de cocina entran en contacto directo con los alimentos que consumimos, y si no se limpian correctamente, pueden quedar residuos de comida, grasa u otros contaminantes que pueden provocar enfermedades transmitidas por los alimentos.

Trucos efectivos para quitar el mal olor a la esponja de lavar loza | Foto: Getty Images

La limpieza de la vajilla ayuda a eliminar los olores y sabores residuales de los alimentos anteriores. Si no se lavan adecuadamente, estos olores y sabores pueden transferirse a los alimentos frescos y afectar su calidad y sabor.

Por último, la limpieza de la vajilla contribuye a mantener su apariencia y durabilidad a largo plazo. Los residuos de alimentos y las manchas pueden dañar los materiales de la vajilla, como la cerámica, el vidrio o el acero inoxidable.

¿Cómo utilizar el limón para regresar el brillo a la vajilla de la cocina?

Con este proceso se puede lograr que los platos y vasos se vean como nuevos y vuelvan a tener la apariencia cristalina que los suele caracterizar de una manera muy económica, incluso, hasta ecológica.

Para llevarlo a cabo es necesario cortar por la mitad un limón y frotarlo en el vaso o plato hasta que quede cubierto del jugo, y luego agregar sal para comenzar a frotar con un paño o con un cepillo de dientes que tenga cerdas suaves, con el fin de que no se quiebre o se raye. Luego solamente hay que enjuagar con agua todo lo que se haya frotado con la mezcla y se podrán obtener grandes resultados.

Las semillas del limón, contiene una lignina, un fitoestrogeno que al ser metabolizado por la microflora intestinal humana. | Foto: Getty Images

Lo que hace la sal es actuar como un estropajo que elimina la cal de la vajilla, mientras que la acidez del limón ayuda a obtener el brillo que se ha perdido. Ya con esto, las personas que quieran lograrlo, podrán aplicarlo las veces que sea necesario para que la vajilla luzca reluciente, a tal punto que pueda parecer nueva en la cocina.