Uno de los órganos más grandes que tiene el cuerpo es la piel, por lo que es importante tener los respectivos cuidados para mantenerlo con un aspecto saludable. Uno de los efectos que más perjudican su bienestar es el envejecimiento, el cual se debe a que las células dejan de llevar a cabo su función adecuada.
Los resultados de envejecer suelen ser las líneas de expresión, arrugas, manchas y flacidez, entre otras marcas que llegan con los años. En este proceso el cuerpo pierde la capacidad de producir algunas sustancias que cumplen funciones clave para mantenerla saludable.
Entre los principales factores que afectan este órgano están la contaminación, el estrés, la exposición indebida al sol y los malos hábitos de vida, los cuales inciden de manera directa en el proceso de envejecimiento, en el cual juegan un rol determinante una mala alimentación y la falta de descanso.
La pérdida de colágeno y elastina llega con la edad, sustancias esenciales para la piel. Mientras que el colágeno aporta firmeza, la elastina brinda elasticidad. Cuando las personas están jóvenes, estas dos proteínas se mantienen en niveles altos. A partir de los 35 años, se requiere de un mayor aporte en la dieta para evitar que los mismos desciendan de manera considerable.
Por fortuna, existen maneras que pueden ayudar a restaurar los tejidos de la piel y prevenir el envejecimiento prematuro. Se trata del uso de mascarillas ricas en vitaminas, colágeno y minerales. Un ejemplo de ello es el aloe vera, también conocido como sábila, además del hielo, siendo aliados para estas afecciones.
Aloe vera y hielo
Esta es una de las formas más útiles para sellar la piel y tener un efecto bótox. Su preparación es fácil, solamente debe poner a congelar en un molde de hielo el gel y cuando ya esté listo, debe pasar el producto por todo el rostro, haciendo suaves masajes circulares.