La jardinería resulta ser un pasatiempo bastante interesante para las personas que cuentan con el espacio y tiempo para cuidar todo tipo de plantas. Desde las especies más exóticas hasta las flores más populares, no hay un límite para los apasionados de esta práctica.

Dentro del cuidado de las plantas destaca un amplio listado de elementos. Uno de ellos es, precisamente, la utilización de abono, lo cual es fundamental para mantener un suelo saludable y proporcionar a las plantas los nutrientes necesarios para crecer y prosperar.

Según información suministrada por la inteligencia artificial ChatGPT, algunos beneficios del uso de abono incluyen:

  • Aporta nutrientes: El abono proporciona una variedad de nutrientes esenciales para el crecimiento de las plantas, como nitrógeno, fósforo, potasio y otros micronutrientes. Estos elementos son necesarios para funciones vitales como la fotosíntesis, el desarrollo de raíces fuertes y la formación de flores y frutos.
  • Mejora la estructura del suelo: El abono ayuda a mejorar la estructura del suelo, haciéndolo más suelto y aireado. Esto facilita la penetración de agua y aire en el suelo, lo que beneficia a las raíces de las plantas y promueve un mejor crecimiento.
  • Aumenta la retención de agua: El abono aumenta la capacidad del suelo para retener agua, lo que es especialmente útil en épocas de sequía o en suelos arenosos que tienden a drenar rápidamente.
  • Fomenta la biodiversidad del suelo: El uso de abono puede aumentar la diversidad de organismos vivos en el suelo, lo que contribuye a un ecosistema del suelo más saludable y equilibrado.
  • Reduce la necesidad de fertilizantes químicos: Al proporcionar nutrientes de manera natural, el abono puede reducir la dependencia de los fertilizantes químicos, lo que puede ser beneficioso para el medio ambiente y la salud a largo plazo.
El uso de abono es altamente recomendado en la jardinería. | Foto: © 2020 Grace Cary

Cáscara de papa como abono para las plantas

Existen diversos materiales que pueden ser aprovechados como abono en la jardinería. La cáscara de papa, por ejemplo, es uno de los más fáciles de conseguir, de manera que es popular en este aspecto.

Para utilizar la cáscara de papa como abono, basta con seguir los siguientes pasos:

  • Recopilar las cáscaras de papa: Guardar las cáscaras de papa que sobren al cocinar. Estas pueden ser almacenadas en un recipiente hermético en la cocina hasta que haya suficientes para compostar.
  • Triturar las cáscaras: Triturar las cáscaras de papa en pedazos más pequeños para acelerar su descomposición. Esto también ayuda a que se integren mejor en el suelo.
Las cáscaras de papa son aprovechadas para hacer compost. | Foto: Montaje: Getty Images.
  • Mezclar con otros materiales: Las cáscaras de papa pueden tardar un poco más en descomponerse completamente debido a su composición gruesa. Para acelerar el proceso y equilibrar la mezcla, funciona combinar las cáscaras de papa con otros materiales compostables como restos de vegetales, cáscaras de huevo trituradas, hojas secas, etc.
  • Mantener el suelo húmedo: Para ayudar en la descomposición de las cáscaras de papa y otros materiales compostados, asegurase de mantener el suelo húmedo, pero no empapado. El agua ayuda a los microorganismos responsables de la descomposición a prosperar.
  • Revolver ocasionalmente: Si es posible, mezclar el compost ocasionalmente para airear y acelerar el proceso de descomposición.
  • Tener paciencia: La descomposición de las cáscaras de papa y otros materiales compostados lleva tiempo. Hay que ser paciente y, eventualmente, se formará un suelo rico en nutrientes para las plantas.