El laurel es conocido por su aroma fuerte y agradable para muchas personas, pero repelente para algunas plagas, como las cucarachas.
A continuación, una serie de recomendaciones para utilizarlas con el objetivo de ahuyentar estos insectos:
Preparación de las semillas de laurel: Debe triturar las semillas de laurel para liberar su aroma. Puede hacerlo utilizando un mortero y una maja o cualquier otro método para moler las semillas.
Esparcir las semillas trituradas: Una vez que las semillas estén trituradas, hay que esparcir el polvo resultante en las áreas donde suele ver cucarachas o donde crea que podrían entrar, como grietas en las paredes, debajo de los electrodomésticos, detrás de los muebles, etc.
Renovación regular: Es probable que necesite renovar el polvo de semillas de laurel cada cierto tiempo, ya que su efectividad puede disminuir con el tiempo debido a la evaporación del aroma.
Combinación con otros métodos: Aunque las semillas de laurel pueden ayudar a repeler a las cucarachas, es posible que también desee combinar este método con otros, como sellar las grietas y hendiduras por donde puedan entrar estos insectos, mantener la cocina y las áreas de almacenamiento limpias y despejadas y utilizar trampas o cebo para eliminar a las cucarachas ya presentes.
Cabe anotar que, si bien las semillas de laurel pueden ayudar a repeler a las cucarachas, no son una solución definitiva para un problema de plagas. Si la infestación de cucarachas es severa, puede ser necesario recurrir a servicios profesionales de control de plagas.
Cómo elegir y usar hierbas medicinales de manera segura
Ponga atención a las afirmaciones hechas acerca del producto. ¿Cómo se describe el producto? ¿Es una píldora “milagrosa” que “desaparece” la grasa? ¿Funcionará más rápido que el cuidado normal? ¿Es un secreto que su proveedor de atención médica y las compañías aseguradoras no quieren que sepa? Tales declaraciones son señales de alerta. Si algo es demasiado bueno para ser cierto, probablemente no lo sea.
Recuerde que las “historias de la vida real” no son pruebas científicas. Muchos productos se promueven con historias de la vida real. Incluso si la cita viene de un proveedor, no hay pruebas de que otra persona puede tener los mismos resultados.
No le dé suplementos herbales a los niños ni los use si tiene más de 65 años de edad. Hable primero con su proveedor.
No use remedios herbales sin hablar primero con su proveedor si está tomando cualquier medicamento.
No los use si va a tener una cirugía.
Siempre dígale a su proveedor sobre los remedios herbales que use. Pueden afectar los medicamentos que toma, así como el tratamiento que recibe.