Las cucarachas, insectos desagradables y potencialmente portadores de enfermedades pueden ser una molestia en cualquier hogar. Si bien existen numerosos métodos para combatirlas, no siempre implica recurrir a productos químicos comerciales, sino a los que se encuentran habitualmente en casa.
Insecticida a base de bicarbonato de sodio y azúcar
Este simple pero efectivo insecticida casero utiliza una combinación de bicarbonato de sodio y azúcar. Hay que mezclar partes iguales de ambos ingredientes y colocarlo en áreas donde las cucarachas son más frecuentes. El azúcar actúa como cebo, mientras que el bicarbonato de sodio actúa como veneno al reaccionar con los ácidos estomacales de las cucarachas.
Solución de ácido bórico
El ácido bórico es un compuesto conocido por sus propiedades insecticidas. En este caso, hay que mezclar el ácido bórico con azúcar y agua para crear una pasta. Hay que colocarla pequeñas cantidades de esta mezcla en tapas de botellas o papel de aluminio en áreas estratégicas. A medida que las cucarachas se alimentan de la mezcla, el ácido bórico las afecta internamente eliminándolas.
Aceites esenciales repelentes
Algunos aceites esenciales como el de menta, eucalipto, cedro y lavanda son conocidos por repeler insectos, incluidas las cucarachas. Se aconseja combinar unas gotas de aceite esencial con agua y aplicar la solución en áreas propensas a la presencia de cucarachas. Esto no solo actuará como un repelente, sino que también dejará un agradable aroma en el hogar.
Vinagre y agua
Otra solución simple y efectiva consiste en mezclar vinagre blanco con agua en partes iguales. Hay que rociar esta mezcla en las superficies donde las cucarachas tienden a congregarse. El olor del vinagre actúa como repelente, y su naturaleza ácida puede afectar a las cucarachas.
¿En qué áreas suelen concentrarse las cucarachas en el hogar?
Las cucarachas, por lo general, tienden a acumularse en cocinas o baños, por eso, es clave aplicar los insecticidas caseros en:
- En grietas y hendiduras.
- Detrás y debajo de electrodomésticos.
- En rincones oscuros y áreas húmedas.
- Cerca de tuberías y desagües.
Enfermedades que transmiten las cucarachas
- Salmonelosis: Las cucarachas pueden transportar la bacteria Salmonella en sus cuerpos y heces. La contaminación de alimentos y utensilios de cocina con heces de cucarachas puede llevar a la salmonelosis, una enfermedad gastrointestinal caracterizada por síntomas como diarrea, fiebre y vómitos.
- E. coli: También pueden transmitir la bacteria Escherichia coli (E. coli), que puede causar infecciones gastrointestinales y enfermedades relacionadas con alimentos contaminados.
- Infecciones respiratorias: Las partículas de alérgenos presentes en las heces, la saliva y las descamaciones de cucarachas pueden desencadenar problemas respiratorios y agravar condiciones como el asma.
- Sepsis: Aunque es raro, las cucarachas pueden ser portadoras de bacterias como Enterobacter, Klebsiella y Pseudomonas que pueden provocar infecciones graves, incluida la sepsis, si estas bacterias entran en el cuerpo a través de heridas o cortes.
- Alergias: Las cucarachas también son una fuente importante de alérgenos, y la exposición a sus partículas puede desencadenar reacciones alérgicas, especialmente en personas sensibles. Los síntomas incluyen picazón en los ojos, estornudos y problemas respiratorios.