Los ratones son pequeños roedores que han convivido históricamente con los seres humanos. A pesar de su tamaño diminuto, su presencia en los hogares puede generar una serie de problemas tanto de salud como estructurales.

Existen diversas razones por las cuales los ratones buscan refugio en las viviendas, siendo el frío una de las principales. Durante los meses de invierno, estos animales buscan lugares cálidos y acogedores donde puedan regular su temperatura corporal.

Por otro lado, los ratones son animales oportunistas y poseen un agudo sentido del olfato, lo que les permite detectar fácilmente fuentes de alimento. Las casas, especialmente aquellas con despensas mal organizadas o restos de comida en áreas de difícil acceso, representan un festín para ellos.

Los ratones son animales portadores de enfermedades y bacterias. | Foto: Getty Images

Otro factor importante es la facilidad de acceso. A pesar de su pequeño tamaño, son muy ágiles y pueden pasar a través de aberturas tan pequeñas como un agujero de 6 mm de diámetro. Estas aberturas, presentes en paredes, ventanas, puertas o alrededor de cables eléctricos y tuberías, les permiten ingresar sin dificultad alguna.

¿Por qué es peligroso tener ratones en casa?

Uno de los mayores peligros asociados con los roedores es la transmisión de enfermedades. Según explica el portal Tua Súde, estos animales son conocidos por ser portadores de patógenos peligrosos que pueden afectar a los seres humanos. Entre las enfermedades más comunes que transmiten se encuentran el virus del hantavirus, la leptospirosis, la salmonella, la peste negra y la fiebre tifoidea. Además, pueden propagar alergias debido a la presencia de su orina, heces y caspa en el aire.

“Las ratas son roedores que pueden contaminar alimentos o agua con bacterias o virus presentes en su orina, heces o pelos, o transmitir enfermedades a través de la picadura de pulgas contaminadas”, señalan.

También representan una amenaza física para las estructuras de las viviendas. Sus dientes nunca dejan de crecer, lo que los obliga a roer de manera constante para desgastarlos. Este comportamiento puede causar daños en cables eléctricos, aislantes, muebles y estructuras de madera. En algunos casos, dichos daños pueden generar cortocircuitos o incluso incendios, aumentando el riesgo de accidentes graves.

La forma correcta de usar la cebolla para ahuyentar los ratones

Afortunadamente, existen métodos naturales y efectivos para mantener a los ratones alejados de la casa. Uno de estos métodos es el uso de la cebolla, un remedio casero ampliamente recomendado por su potente aroma, que resulta desagradable para los roedores. Según la web expertoanimal.com, la cebolla contiene compuestos sulfurados, como el ácido sulfénico y el disulfuro de dialilo, responsables de su sabor picante característico. Estos compuestos pueden ser irritantes tanto para los humanos como para los roedores.

Son muchas las causas que pueden generar la presencia de ratones en el hogar. | Foto: Getty Images

Para usar la cebolla como repelente, basta con cortar una pieza en varios trozos y colocarla en las áreas donde dichos animales suelen aparecer, como cerca de las entradas, las despensas o los rincones oscuros de la casa. El fuerte olor de este vegetal actúa como una barrera que las ratas intentarán evitar. Es importante cambiar la cebolla cada pocos días para asegurarse de que el aroma se mantenga fuerte y efectivo.

La fuente mencionada también señala que algunos olores naturales, como los aceites esenciales de menta o eucalipto, tienen la capacidad de repeler a los ratones. Sin embargo, la cebolla se presenta como una opción económica, fácil de conseguir y libre de químicos, lo que la convierte en una excelente alternativa para quienes prefieren métodos naturales.

“Los olores que odian los ratones son variados, por ejemplo el cloro, la menta, la hierba buena o la orina de otros animales. Algunos les producen rechazo por contener sustancias químicas peligrosas, mientras que otros sugieren la presencia de posibles depredadores”, precisan.