Normalmente, la presencia de pulgas está asociada con mascotas como gatos y perros, desde donde pueden saltar hacia las personas u otros animales, ya que detectan a sus huéspedes gracias a su temperatura corporal, el dióxido de carbono que exhalan y el movimiento.
Se trata de insectos que se alimentan de la sangre caliente y cuando saltan se adhieren a los nuevos portadores usando unas pequeñas garras en los extremos de sus patas. Así, aunque el animal o persona sobre el que se hallan se rasque o se sacuda, logran mantenerse aferradas a su cuerpo.
Después de conseguir un nuevo lugar para habitar, las pulgas pueden permanecer ocultas bajo la ropa o en la piel del portador, pero lo habitual es que no se queden por mucho tiempo y salten a otra persona o animal.
A esto se suma que sus huevos suelen caer al suelo, donde eclosionan. Posteriormente, las larvas se adhieren con fuerza a las fibras de las alfombras, tapicerías y colchones y debido a su pequeño tamaño, suelen pasar desapercibidas, por lo que es fácil que se propaguen por el hogar.
Las picaduras de estos insectos se presentan principalmente en las piernas y en los lugares en donde la ropa queda ajustada al cuerpo, como en la cintura, los glúteos, los muslos y el vientre bajo, y los síntomas incluyen pequeñas protuberancias rojas, que con frecuencia se agrupan y causan mucha picazón y ampollas si la persona tiene alergia a las picaduras de pulga.
Para hacerle frente a estos insectos y su proliferación, uno de los trucos caseros al que se puede recurrir es el bicarbonato de sodio. El portal de estilo de vida unCOMO indica que este producto consigue eliminar tanto las larvas como los huevos de las pulgas. Si se mezcla el bicarbonato con un poco de sal común se consigue un producto potente con el que se pueden erradicar estos insectos sin emitir gases tóxicos a la atmósfera.
Para hacer uso de esta alternativa se pueden seguir los siguientes pasos:
- Mezclar los ingredientes: Se requiere de sal yodada, bicarbonato de sodio y una botella o recipiente para mezclar.
- Se espolvorea el producto: Luego se hacer la mezcla se va espolvoreando este remedio casero por la alfombra, el sofá y todos los lugares de la casa que puedan estar infestados.
- Cepillo o escoba: si se quiere una desinfección profunda se recomienda usar un cepillo para esparcir más el producto y que quede de forma homogénea.
- Se deja reposar: el siguiente paso es que la pasta repose durante toda la noche. La mezcla lo que hará será deshidratar y terminar con las pulgas.
- Pasa el aspirador: al día siguiente se debe aspirar para poder eliminar las pulgas que estén muertas o a punto de morir.
Un aspecto clave a tener en cuenta es que para que este remedio resulte efectivo es esencial que el bicarbonato esté activo y para comprobarlo solo se requiere vertir unas gotas de vinagre en el producto y ver su reacción: si aparecen burbujas al instante es porque está activo; si no reacciona o lo hace de forma muy débil, no funcionará.
Inconvenientes asociados a las picaduras de pulgas
Si bien para los humanos, el riesgo de contraer una enfermedad debido a la presencia de pulgas en el hogar es muy pequeño, lo cierto es que las picaduras podrían facilitar la entrada de bacterias al cuerpo y causar una infección, especialmente si la persona se rasca. Los expertos aseguran que cuando una picadura está infectada se pondrá roja, tibia al tacto y puede liberar pus.
En otros casos es posible que cuando estos insectos pican causen una reacción alérgica en personas sensibles a ellos. Los síntomas pueden variar desde ronchas abultadas en la piel hasta dificultad para respirar, por ejemplo.
Además de las afectaciones en los humanos, estas picaduras también pueden generar complicaciones en las mascotas, como reacciones alérgicas e incluso anemia, debido a la pérdida de sangre.