El brócoli es una verdura que se caracteriza por ser rica en vitaminas y minerales, por lo que se convierte en un alimento aliado del organismo y de su buen funcionamiento.
El portal Cuerpo Mente indica que una ración de 200 gramos de este vegetal cubre las necesidades diarias de vitamina C de un adulto, por ejemplo. También satisface los requerimientos diarios de ácido fólico y dos terceras partes de los de vitamina A.
Es una verdura que contiene selenio, potasio, calcio, fibra, vitaminas del complejo B y proteínas vegetales, además de fitoquímicos (glucosinolatos y flavonoides). Es rica en flavonoides, componentes que se caracterizan por su acción antioxidante, así como por su capacidad para neutralizar los efectos negativos de los radicales libres en cada célula, según una investigación publicada en la revista Free Radical Research.
Dentro de las bondades que se le atribuyen en relación con la salud se dice que ayuda a reducir el colesterol malo (LDL). Esto se debería a la acción de los glucosinolatos, específicamente de la glucorafanina, que actúa como antioxidante, inhibiendo la síntesis de este tipo de lípido.
El portal de salud Tua Saúde indica que otro de los factores que ayudan en el control del colesterol son las fibras solubles, las cuales se unen a esta grasa en el intestino y disminuyen su absorción en el organismo.
También se dice que la ingesta de este alimento ayuda a que los vasos sanguíneos se mantengan más resistentes, por lo que resultaría favorable para controlar la presión arterial. Un beneficio más es que es buena fuente de sulforafano, sustancia con propiedades antiinflamatorias que previenen la aparición de lesiones en las arterias y vasos sanguíneos.
De igual forma, debido a su riqueza en vitamina A, también sería beneficioso para los ojos. Un artículo del diario La Vanguardia, de España, asegura que su consumo es bueno para evitar la degeneración macular asociada a la edad, las cataratas y los daños de las radiaciones ultravioleta.
¿Cómo conservarlo fresco?
Lo ideal es consumir vegetales y verduras frescas para aprovechar mejor sus nutrientes. En el caso del brócoli se pueden utilizar algunos trucos que ayudan a mantenerlo en buen estado.
Envolverlo en toallas de papel húmedas. El portal Wiki How indica que una forma de mantener este vegetal fresco es llenar una botella de espray limpia con agua fría, luego se rocían ligeramente las cabezas del brócoli.
Se envuelven holgadamente con una toalla de papel, de modo que esta absorba algo de la humedad y se mantiene la verdura en el refrigerador. De esta forma permanece fresco durante cerca de tres días. La recomendación es no apretar demasiado el brócoli al momento de envolverlo con las toallas y no guardarlo en un recipiente sellado. Este vegetal requiere que el aire circule para permanecer fresco.
Otra alternativa es meterlo en una bolsa de plástico común. Solo se sella el brócoli en la bolsa, luego se le hacen agujeros cerca de la cabeza del brócoli para garantizar un buen flujo de aire y se mantiene refrigerado. Con este método, el brócoli debe permanecer fresco durante varios días.
Una opción más es colocarlo dentro de un refractario de vidrio y guardar en el cajón de frutas y verduras en el caso de utilizarlo en los próximos cinco días. Si no se tiene planeado usarlo en este tiempo, lo mejor es agregar agua al refractario para cubrir un poco los ramilletes y llevar a la nevera o congelador, de esta forma podrá durar hasta por dos semanas.