Un grupo de investigadores demostró lo antihigiénico que podría ser descargar la cisterna de un inodoro sin bajar la tapa, y advirtió sobre los posibles riesgos a la salud que esto implica debido a las partículas nocivas liberadas, según se detalló en un estudio de la revista Scientific Reports.
Cuando se realiza la descarga de un inodoro, salpican a gran velocidad unas gotas microscópicas que podrían contener partículas de heces, las cuales vienen acompañadas de bacterias, virus y otros patógenos que podrían permanecer en la taza por varias horas.
Un experimento que busca cambiar malos hábitos
Con una cámara especial de alta velocidad y una luz láser con un intenso color verde, los científicos hicieron la prueba de tirar la cadena de un inodoro sin tapa para simular lo que ocurre en un baño público. De esta manera, se pudo observar la rapidez y la distancia en la que los aerosoles fueron liberados.
Los resultados del experimento fueron mucho más alarmantes de lo inicialmente previsto por los investigadores: “Si hay algo que no puedes ver, es fácil fingir que no existe. Pero una vez que veas estos videos, nunca volverás a pensar en descargar un inodoro de la misma manera”, afirmó John Crimaldi, principal autor de la publicación.
Si bien otras investigaciones habían revelado que los aerosoles liberados al descargar un inodoro podían contener partículas y patógenos peligrosos, se trató del primer experimento que reveló gráficamente la velocidad, duración y distancia en que los aerosoles pueden distribuirse.
Aerosoles de hasta 1,5 metros de altura
En los videos dados a conocer por los científicos, se puede apreciar que las partículas aéreas salen eyectadas a una velocidad de 2 metros por segundo, con una propulsión que les permite alcanzar 1,5 metros por arriba del inodoro en solo 8 segundos.
“Nosotros esperábamos que estas partículas de aerosol simplemente flotaran hacia arriba, pero salieron como un cohete”, describió Crimaldi. Asimismo, la investigación reveló que las partículas más pequeñas se quedan en el aire por más tiempo que las grandes.
Prevenir enfermedades
Los expertos advierten que los patógenos provenientes de las partículas de las heces que permanecen en el inodoro podrían contener norovirus, adenovirus o bacterias como la E. coli o C. difficile, que producen diversas enfermedades.
Los científicos esperan que este tipo de experimentos puedan concientizar a las personas sobre los riesgos a la salud que podría implicar no bajar la tapa al tirar la cadena de un inodoro.
“Al ofrecer imágenes visuales espectaculares de este proceso, nuestro estudio puede desempeñar un papel importante en los mensajes de salud pública”, afirma Crimaldi.
*Con información de la agencia DW