Durante más de 20 años, Dan Buettner ha estudiado los hábitos de vida de las personas más longevas del mundo y los ha catalogado en algo que llama las “zonas azules”, lugares donde viven la mayor cantidad de personas centenarias por metro cuadrado. En medio de su investigación, este experto desveló los cuatro alimentos que no se deberían comer.
En sus estudios e investigaciones, Buettner ha conocido y experimentado cómo viven, qué comen, cómo se relacionan y otros aspectos de la vida de las personas más longevas y reveló que la alimentación resulta ser un factor clave. Además, explicó cuáles son los alimentos que no se deben consumir.
Por lo general, estos productos son muy ricos, pero muy poco saludables, y Buettner los ha catalogado como “la receta para el fracaso”, por lo que lo más recomendable es no ingerirlos de forma diaria.
Bebidas azucaradas
Las bebidas o refrescos azucarados son una de las principales fuentes de azúcares añadidos, además, su consumo está relacionado con el desarrollo de sobre peso, obesidad, diabetes, hipertensión, enfermedades cardiovasculares, entre otras.
‘Snacks’ salados
Todos esos paquetes de papas fritas están estrechamente relacionados con la obesidad, debido a que concentran sodio, almidón y grasas. De igual manera, estos productos acumulan grasas excesivas que desencadenan en enfermedades metabólicas, cardiopatías, entre otras, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Caramelos y otros dulces
Los dulces y caramelos, como lo son las galletas, bombones, helados, entre otros, no solo son fuentes de azúcares libres, sino que también son una fuente de grasas saturadas, lo cual termina produciendo obesidad y aterosclerosis.
Alimentos ultraprocesados
El último grupo de alimentos que son prohibidos, según el experto Buettner, son los ultraprocesados, los fiambres, embutidos, salchichas, pizzas congeladas, cereales de desayuno, sopas preparadas y otros alimentos que no tienen una buena calidad nutricional.
El experto indicó que para distinguir estos alimentos se debe mirar el estado de los ingredientes y recomienda optar por las alternativas menos procesadas, con menor número de ingredientes y que no posean azúcares añadidos.
Según Buetnner, estos son los cuatro alimentos que no se deberían consumir de manera diaria, si el objetivo es tener una vida sana y extensa.