La limpieza de un extractor de cocina puede ser un desafío, pero con algunos trucos y técnicas adecuadas puede dejarlo reluciente.
A continuación, algunos consejos:
Desmontar las partes lavables: Si es posible, desmonte las partes del extractor que se pueden lavar, como los filtros y las cubiertas. Esto facilitará la limpieza y permitirá acceder a todas las áreas.
Remojar en agua caliente con detergente: Llene un recipiente grande con agua caliente y agregue un poco de detergente para platos. De remojar las partes desmontables del extractor en esta solución durante al menos 15-20 minutos para aflojar la grasa y la suciedad.
Cepillado y frotado: Después del remojo, utilice un cepillo de cerdas suaves o una esponja no abrasiva para frotar suavemente las partes del extractor. Preste especial atención a las áreas con acumulación de grasa. También puede usar un cepillo de dientes viejo para llegar a los rincones difíciles.
Vinagre blanco y bicarbonato de sodio: Para eliminar manchas difíciles o restos de grasa, puede hacer una pasta con bicarbonato de sodio y un poco de vinagre blanco. Aplique esta pasta sobre las áreas problemáticas y deje que actúe durante unos minutos antes de frotar y enjuagar.
Enjuague y secado: Después de limpiar todas las partes del extractor, enjuague bien con agua limpia para eliminar cualquier residuo de detergente o solución de limpieza. Luego, secar con un paño limpio o dejarlas secar al aire antes de volver a ensamblar el extractor.
Mantenimiento regular: Para evitar que la grasa y la suciedad se acumulen demasiado, intente limpiar el extractor de cocina regularmente, al menos una vez al mes. Esto facilitará la limpieza y mantendrá el extractor en óptimas condiciones.
¿Por qué es importante limpiar los filtros de la campana extractora?
De acuerdo a lo que se informa en el blog español Balay, los filtros de su campana extractora son los mejores aliados para combatir la grasa, los humos y los olores.
Y si usted quiere que sean lo más eficientes posibles, es necesario que siempre los mantenga limpios. Por eso, se aconseja que los lave cada dos meses para evitar acumulaciones de grasa que después sean prácticamente imposibles de eliminar.
En cuanto a la importancia de unos filtros limpios, estos son los motivos para que reluzcan:
- Eficiencia: los filtros obstruidos reducen la capacidad de la campana para eliminar humos y olores, creando un ambiente más pesado y cargado.
- Seguridad: a acumulación de grasa en la campana puede ser una de las causas de que se produzca un incendio en la cocina.
- Salud: la grasa y la suciedad acumuladas pueden ayudar a que proliferen ciertas bacterias perjudiciales para la salud.
- Vida útil: un filtro limpio protege el motor de la campana y así se alarga su vida útil.