El baño es uno de los espacios de la casa en donde con frecuencia debe realizarse limpieza para evitar que se generen malos olores. Estos sitios son propicios para que aparezcan y se proliferen gérmenes que derivan en enfermedades de todo tipo, desde cutáneas y gastroenteritis hasta inconvenientes más complejos, como hongos e infecciones.
Los expertos aseguran que los baños deben lavarse al menos una vez a la semana y el aseo que se recomienda debe ser a profundidad, limpiando las superficies visibles como el piso, las paredes, el espejo y la taza del baño. Pero también aquellos espacios que no son tan visibles, porque la suciedad y las bacterias pueden acumularse en esos puntos.
Así las cosas, es importante saber no solo con qué productos se puede desinfectar el baño, sino también qué es viable usar para que permanezca con un aroma agradable, pues es frecuente que estos espacios cojan malos olores.
Esto puede proceder de las tuberías, toallas que no se han secado bien, falta de limpieza, un exceso de humedad, una mala ventilación o el moho, precisa el portal El Mueble. Para hacerle frente a esta situación, hay algunas mezclas de productos que resultan favorables y una de ellas es el bicarbonato con vinagre.
Vinagre y bicarbonato
Este es un poderoso truco casero e inofensivo para el medio ambiente, que es bueno para acabar con los hongos y la acumulación de restos de jabón y para hacer que el baño siempre huela bien. Para aprovechar sus beneficios se realiza la mezcla (mitad y mitad) en un recipiente aparte y no debe taparse, ya que los gases que generan podrían hacer que explote.
Después se vierte por el desagüe con un poco de agua y se deja que actúe durante media hora. Posteriormente, se añade agua muy caliente con el fin de que termine de eliminar todas las posibles bacterias y hongos, lo que permite que se obtenga un olor a limpieza en el lugar. Las paredes y otras partes del baño también pueden limpiarse con esta mezcla casera.
Algunos trucos para evitar malos olores en el baño
Una de las razones frecuentes por las que los baños no tienen buen olor es porque las toallas no están secas. Tanto estas prendas como las alfombras acumulan humedad, lo que provoca un ambiente de malos olores. Esta situación puede evitarse cambiando cada tercer día las toallas y colgándolas correctamente. También es viable perfumarlas con un ambientador de textiles antes de guardarlas para conseguir olores agradables en el baño, según la revista Architectural Digest.
Aplicar un poco de suavizante en la cisterna del baño es otra opción, para que cada vez que se baje se libere el olor dejando un aroma de ambiente limpio. Esta es una de las formas más sencillas para mantener con olores agradables en este espacio de la casa.
Un último consejo es limpiar la papelera con frecuencia. Es muy habitual que este recipiente tenga malos olores, por eso es necesario cambiar las bolsas con cierta regularidad para evitar acumular demasiados residuos que aumentan el mal olor. Es clave limpiar la caneca al menos una vez por semana, lavarla con agua y vinagre y cuando esté seca espolvorear un poco de bicarbonato de sodio para neutralizar los olores.