Cuando se trata de proyectos de bricolaje o reparaciones en el hogar, a veces se encuentra con tornillos que simplemente no quieren ceder. Ya sea en muebles, electrodomésticos o proyectos de automoción, lidiar con tornillos apretados puede ser frustrante. Sin embargo, existen trucos que pueden facilitar esta tarea.
Los tornillos pueden resistirse a ser aflojados por varias razones. Algunas de las razones más comunes incluyen:
- Corrosión: La corrosión es una de las principales razones por las que los tornillos se vuelven difíciles de aflojar. La exposición a la humedad y a los elementos puede hacer que el metal del tornillo se oxide con el tiempo, creando una capa de óxido que lo hace más difícil de girar.
- Sobretensión: Si el tornillo se apretó en exceso en su lugar, puede generar una fuerza de sujeción extrema que dificulta su aflojamiento. Esto es común en aplicaciones donde se usan herramientas eléctricas o neumáticas para apretar los tornillos.
- Residuos o pegamento: En algunos casos, los tornillos pueden estar cubiertos de residuos, pegamento o pintura que se endurecen con el tiempo y hacen que el tornillo quede pegado a la superficie.
- Desgaste del tornillo: Con el tiempo, tanto los tornillos como las herramientas utilizadas para aflojarlos pueden desgastarse, lo que dificulta su manipulación.
Trucos para aflojar los tornillos
Utilizar aceite penetrante
El aceite penetrante es un aliado valioso en la lucha contra los tornillos apretados. Según el Servicio de Extensión Cooperativa de la Universidad de California, se recomienda aplicar aceite penetrante de calidad en el área del tornillo y darle tiempo para penetrar y aflojar la corrosión. Repetir este proceso durante varias horas o incluso de un día para otro puede hacer que el tornillo sea más fácil de girar.
Calor controlado
La aplicación de calor controlado puede expandir el metal del tornillo y aflojarlo. Según la revista Popular Mechanics, se puede utilizar un secador o una pistola de calor para calentar el área del tornillo durante unos minutos y luego intentar girarlo con una llave o destornillador. Este método es efectivo, especialmente cuando los tornillos están atascados debido a la expansión térmica.
Impacto suave
Golpear suavemente el tornillo puede romper la adherencia de la corrosión. Según la revista This Old House, se puede usar un destornillador o una llave inglesa y un martillo para golpear suavemente en la dirección de aflojamiento mientras se aplica presión constante. Este impacto ayuda a liberar la fricción y aflojar el tornillo.
Bicarbonato de sodio y vinagre
Una pasta de bicarbonato de sodio y vinagre, respaldada por la Universidad de Arkansas, puede ser efectiva para aflojar tornillos. Se recomienda aplicar esta mezcla en el área del tornillo y dejarla actuar durante unos minutos. La reacción química resultante puede ayudar a debilitar la corrosión y facilitar el aflojamiento.
Llave de impacto manual
Una llave de impacto manual es una herramienta que utiliza fuerza cinética para aflojar tornillos y tuercas. La revista Family Handyman sugiere utilizar una llave de impacto manual para aplicar golpes controlados en la dirección de aflojamiento. Esto es particularmente útil para tornillos resistentes en trabajos de automoción y mecánica.