La ropa de color negro es clave en el armario de cualquier persona. No obstante, se debe tener en cuenta que se encuentra entre las prendas que más se destiñen con los lavados.
Para evitar esto, existen dos ingredientes caseros y efectivos, el vinagre blanco y la sal.
Vinagre blanco: el vinagre ayuda a fijar los colores y también suaviza la ropa. Agregue una taza de vinagre blanco durante el ciclo de enjuague. Además, es un excelente suavizante natural que no daña los tejidos.
Sal: la sal también ayuda a preservar los colores oscuros, ya que evita que los tintes se desprendan de las telas. Añada media taza de sal junto con tu detergente habitual para mantener los colores vibrantes.
Estos ingredientes son baratos y fáciles de encontrar y son una excelente manera de evitar que la ropa oscura se decolore o se desgaste con el tiempo.
Más consejos para mantener el color de la ropa oscura
Clasificar la ropa por colores. Separar las prendas negras de las más claras resulta esencial para prevenir cualquier transferencia de tintes. Además, lavar la ropa negra del revés minimiza el contacto directo con el agua, reduciendo el roce entre las prendas y, por ende, el riesgo de que se destiña.
Lave la ropa al revés: dele la vuelta a las prendas oscuras antes de lavarlas. Esto reduce el contacto directo con el detergente y el roce, lo que ayuda a conservar el color.
Use agua fría: lave la ropa oscura en agua fría. El agua caliente puede hacer que los tintes se desgasten más rápidamente.
Evite el exceso de detergente: use la cantidad justa de detergente. Un exceso puede dejar residuos que opacan los colores.
Secado al aire: evite la secadora siempre que sea posible, ya que el calor puede hacer que los colores se desvanezcan más rápido. Deja que la ropa se seque al aire libre, preferiblemente a la sombra, para protegerla del sol.
Use detergentes especiales: existen detergentes diseñados específicamente para ropa oscura, que contienen ingredientes que ayudan a proteger el color.
Guardarla de forma correcta: para que la ropa negra no pierda su color original se debe almacenar de forma correcta. Es decir, hay que evitar que la luz directa del color caiga sobre las prendas. Asimismo, es importante que el lugar en donde se guarde la ropa sea fresco y no haya humedad.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de Semana.