En la cocina, existen ciertos utensilios indispensables que permiten a las personas preparar sus comidas de manera rápida y eficiente. Las ollas, por ejemplo, son elementos esenciales, ya que se encargan de cocinar los alimentos a la perfección, proporcionándoles la textura adecuada. Además, desde una perspectiva de salubridad, el uso de ollas ayuda a minimizar el riesgo de contaminación bacteriana, asegurando la seguridad alimentaria.
A pesar del continuo avance tecnológico que ha llevado al lanzamiento de diversos electrodomésticos por parte de grandes marcas, que en teoría podrían reemplazar las ollas tradicionales, muchas personas aún prefieren utilizar los utensilios convencionales debido a la sensación de seguridad que les proporcionan.
Sin embargo, es importante destacar que estas cacerolas requieren un cuidado especial. Si no se utilizan los utensilios adecuados, el revestimiento de teflón podría dañarse, lo que afectaría el proceso de cocción de los alimentos, pudiendo provocar que estos se peguen y alteren su sabor.
Por esta razón, muchas personas optan por adquirir cucharas de madera, que durante mucho tiempo han sido consideradas como una opción preferida debido a la creencia de que protegen la superficie de las ollas, evitando así su deterioro prematuro. Pero, ¿es esto realmente cierto?
Según el sitio web Alimentos Mary, la madera es un material que facilita el proceso de mezclado de alimentos, a diferencia de otros materiales como el metal, el cual no se recomienda en la cocina debido a que puede desprender sustancias tóxicas cuando se expone al calor.
Si bien las cucharas de madera pueden preservar el estado de las ollas y conservar el sabor de los alimentos, es importante tener en cuenta que su uso recurrente puede plantear ciertas contradicciones en términos de salud.
¿Por qué no debería usar cucharas de madera?
Aunque puedan parecer utensilios inofensivos y preferidos por muchas personas, las cucharas de madera pueden ser un caldo de cultivo para microorganismos perjudiciales para la salud, según lo señala el portal web El Mueble.
Debido a su naturaleza porosa, las cucharas de madera pueden desprender astillas con el calor, las cuales podrían contaminar los alimentos y causar daños al ser ingeridas, llegando incluso a provocar problemas estomacales.
Una vez que los microorganismos encuentran refugio en este tipo de utensilios, eliminarlos por completo resulta complicado, ya que se alojan tanto en la superficie como en el interior de la madera, haciendo difícil su erradicación con jabones o desinfectantes convencionales, dado que penetran profundamente en el material.
El uso prolongado de utensilios de madera en la cocina puede aumentar significativamente el riesgo de intoxicación alimentaria o enfermedades estomacales. Por lo tanto, se recomienda renovar los utensilios de madera con regularidad para garantizar la seguridad alimentaria y prevenir posibles riesgos para la salud y el bienestar de usted y su familia.
Para mantener la salud y seguridad en la cocina, una alternativa recomendable es sustituir las cucharas de madera por utensilios de silicona. Es importante tener en cuenta que los utensilios de plástico tampoco son la opción más saludable, ya que pueden derretirse con el calor y provocar contaminación cruzada en los alimentos.