Para nadie es un secreto que la mayoría de las personas se han visto involucradas en varias situaciones incómodas en la cotidianidad de la vida cuando olvidan el nombre de una persona conocida. Esto no quiere decir que sea algo personal, solo que el cerebro decidió omitir en esa ocasión el nombre de dicha persona.

Cuando esto sucede, no hay por qué sentirse culpable o mal, y más teniendo en cuenta la cantidad de gente con la que una persona puede llegar a conocer a lo largo de su vida, y aunque en el momento no se acuerde del nombre de ese sujeto, lo más seguro es que sí logre recordar el rostro.

Es normal que el cerebro olvide el nombre de una persona conocida. | Foto: Getty Images/Westend61

De acuerdo a una investigación realizada por la Universidad de York en Reino Unido, el recordar la cara tiene que ver con el reconocimiento, pero el acordarse del nombre de las personas depende más de la memoria.

Suele suceder que la persona no se dará cuenta de que ha olvidado un nombre hasta que ve el rostro de ese sujeto y lo reconoce.

Charan Rangathan, un neurocientífico de la Universidad de California en Davis, explicó en una entrevista con Carmine Gallo, que existen trucos y técnicas para acordarse de los nombres de las personas.

Este científico explicó que lo primero que hay que tener en cuenta es no sentirse culpable a la hora de no poder recordar el nombre de una persona conocida.

“No se te da bien recordar los nombres de la gente porque no estamos hechos para recordar todo nuestro pasado. Los mecanismos de la memoria no fueron construidos para ayudarnos a recordar el nombre de ‘ese tío que conocimos en esa cosa’”, indicó.

Charan también soltó un dato muy importante, y es que el ciudadano promedio recibe 34 gigas de información cada día, lo que equivale a 11,8 horas de imágenes, sonidos y todo tipo de información. Es por ello que el cerebro está diseñado para omitir la mayoría de la información que recibe al día.

“Cuanta más información se tenga sobre una persona, su nombre se hace mucho más fácil de relacionar con su cara”, sostuvo.

El científico señaló que para evitar pasar una situación incómoda lo más importante es la intención de acordarse, ya que si la persona se plantea el objetivo de acordarse de algo, lo hará sin mayor esfuerzo.

Afirma que: “Cuando me dices que te resulta difícil acordarte de los nombres de las personas, lo que realmente estás diciendo que no recuerdas es la asociación entre el nombre y la cara”. Además, añadía que “cuanta más información se tenga sobre una persona, su nombre se hace mucho más fácil de relacionar con su cara”, agregó.

Hay varias técnicas para recordar el nombre de una persona. | Foto: Getty Images

Incluso, Charan puso un ejemplo con el mismo entrevistador. “Sé que existe un personaje que se llama Carmine en la serie Laverne & Shirle”, dijo en un principio y agregó: “también conozco Gallo, la marca de vinos”. Así, a Raganath le será mucho más sencillo recordar el nombre del entrevistador.

De igual manera, también puso un ejemplo con su nombre: “Si sabes de mitología griega, podrías enlazar mi nombre con Charon, el barquero del inframundo” sugería, añadiendo, que “si hay algo de mi aspecto que te recuerde a Grecia o a la mitología, podrás recordar mi nombre la próxima vez que me veas la cara”.

Charan finalizó su punto, asegurando que la clave está en el intento de hacer un esfuerzo por encontrar la forma de recordar el nombre de dicha persona.