Hay muchas personas para quienes llevar joyas es determinante, pues son accesorios que forman parte de la vestimenta, pero que además se relacionan con feminidad y belleza. Las hay de muchos materiales: oro, plata, bronce y latón, entre otros.
Sin embargo, hay ocasiones en las que algunos elementos pueden generar un color verde en la piel y por ello es bueno saber por qué se produce esta situación y qué tipo de joyas pueden causarla.
De acuerdo con información de la página Kiribiltxo, las joyas elaboradas en plata, latón o bronce pueden dejar en la piel manchas verdes a algunas personas, aunque esto no resulta perjudicial.
Esto se debe, indica la mencionada fuente, a que la plata, el latón o el bronce tienen diferentes metales en su composición.
“La plata esterlina o de ley, por ejemplo, está compuesta en un 92.5 % de plata y el 7.5 % restante de otros metales entre ellos el cobre. El cobre también se utiliza para hacer el latón o el bronce y es el causante de que a algunas personas les deje la piel verdosa”, precisa.
Esto se debe a que se presenta una reacción química entre los metales presentes en la joyería y la composición de la piel.
Se dice que quienes tienen el pH de la piel ácido hacen que el cobre reaccione químicamente con el sudor y libere cloruro de cobre dejando una mancha verdosa. Si se utilizan crema de manos u productos para la piel, también pueden contribuir a la reacción química y la consecuente aparición de manchas.
Truco para evitar el color verde
Según el portal de estilo de vida unCOMO, existe un truco para evitar que un anillo deje el dedo verde y es algo muy sencillo. Para ello solo se requiere de un esmalte transparente para uñas, el cual normalmente se usa para darles brillo.
Para poner en marcha este truco se aplica una capa en el interior del anillo, es decir, la parte que entra en contacto con la piel y se deja que se seque. Es importante hacerlo justo cuando se compra la joya, pues de esta manera se evita que se deteriore o huela a óxido.
Para conseguir que esta estrategia perdure más en el tiempo se puede aplicar una capa adicional de esmalte para generar un escudo más grueso entre esta pieza de joyería y la piel.
Con esto se consigue aislar el material y, por tanto, evitar que destiña, aunque puede darse el caso que con el paso de las semanas vuelva a desteñir, así que lo recomendable es que cada 15 días o un mes se aplique una nueva capa de esmalte.
Este consejo también funciona para las personas que tienen alergia al material, pues con el esmalte se consigue poner una barrera y evitar que se produzca sarpullido o erupciones debido a la reacción que tiene la piel frente a algunos tipos de joyas.