Aunque a muchas personas les cause sorpresa o les parezca curioso, el mundo de las platas de interior también se divide por géneros, al igual que los seres humanos y los animales, motivo por el que los árboles de jade se pueden ver diferentes entre ellos, pese a que son de la misma especie.

Esto sucede debido a que tienen ciertas cualidades que las diferencian y, si se miran con atención, es posible identificar fácilmente si se trata de una planta hembra o macho.

No obstante, sin importar el género de esta planta, no deja de ser una de las suculentas más populares del mundo de la jardinería debido a que se le atribuye el poder de la suerte y la magia como grandes dotes según el Feng Shui, atrayendo también la prosperidad y la abundancia donde quiera que se encuentre.

A la planta de jade o árbol de jade, también se le conoce científicamente como Crassula ovata o popularmente como planta del dinero, originaria de Mozambique y algunas otras provincias de Sudáfrica, considera como uno de los elementos de decoración más espectaculares en el hogar por varios motivos, entre ellos porque es muy duradera, pese a que crece de forma muy lenta.

El Jade ha encontrado su camino hacia hogares de todo el mundo gracias a su resistencia. | Foto: Getty Images

De esta suculenta existen más de 1400 variedades, según el portal El Mueble, donde además se afirma que su proceso de crecimiento no requiere de muchos cuidados, pero esto no quiere decir que no se le deba dar relevancia a ciertos aspectos como el riego o el espacio en el que permanece, siendo el más adecuado un lugar donde pueda tener un clima intermedio, donde ni el sol le afecte, pero tampoco permanezca en una zona demasiado húmeda y fría.

La planta de jade | Foto: Getty Images

Diferencias entre un árbol de jade macho y uno hembra

Pese a que las cualidades que las diferencian no son fáciles de identificar a simple vista, si hay algunos rasgos que pueden ayudar en el proceso para identificar su género de manera rápida y sencilla, como la presencia de flores durante la época de floración, que suele aparecer en la planta macho y las cuales suelen ser pequeñas y de color blanco o rosado.

Además, los estambres del árbol de jade macho son más largos y se encuentran en el centro de la flor. Otro de los aspectos que los diferencia es que sus hojas generalmente son más delgadas y alargadas en comparación con las de las plantas de jade hembra. También se puede identificar porque tiene un crecimiento vertical más pronunciado.

Por su parte, el árbol de jade hembra no produce flores durante su etapa de floración, sino que se desarrollan pequeñas protuberancias redondeadas en las ramas, las cuales se conocen como yemas y que, al cabo de unos días o semanas, se convierten en hojas nuevas, las cuales son más anchas y redondeadas en comparación con las de las hojas de jade macho.

Árbol de jade | Foto: Getty Images

La planta de jade hembra también se diferencia de la macho porque tiene un crecimiento más lateral, lo que les da una apariencia de estar más rellenas. Es importante mencionar que el término de su género se utiliza en referencia a la capacidad de producir flores., ya sean blancas o rosadas, que se forman racimos en la parte superior de los tallos.