Los rituales son prácticas muy populares a las que muchas personas acuden con el fin de alcanzar diversos propósitos y uno de ellos es la búsqueda de prosperidad y dinero.
Cuando se trata de lograr este tipo de objetivos, las personas recurren al uso de muchos elementos y dos de ellos son el agua y el azúcar, ritual que atrae la solvencia económica. En esta época de fiestas decembrinas, estas prácticas suelen ser muy comunes en el hogar para iniciar un nuevo año declarando cosas y aspectos positivos.
De acuerdo con el portal Gastrolab, el agua funge como un elemento natural que atrae las vibras positivas, mientras que el azúcar sirve para llamar al hogar la prosperidad o abundancia. Según la filosofía china del Feng Shui, el azúcar está relacionado con el lujo y la atracción de nuevas oportunidades.
Además, se dice que este ingrediente de cocina también cuenta con un carácter simbólico que lo convierte en un componente dulce, capaz de atraer no solo riqueza; también es ideal para la buena energía, precisa la revista Glamour.
¿Cómo hacer el ritual?
La forma en la que se realiza este ritual es la siguiente. Se llena un vaso con agua purificada (sin que se derrame) y se agrega una cucharada de azúcar blanca. También se requiere de una pintura amarilla y una verde, además de una hoja blanca para anotar la lista de deseos que las persona quiere atraer a su hogar.
La razón de estos colores es que el verde se asocia con el dinero y el amarillo se vincula con la prosperidad, la abundancia y el éxito.
En la hoja blanca se escribe con los colores mencionados el nombre completo, la fecha y el lugar de nacimiento, se dobla el papel y luego se coloca encima el vaso con agua.
Posteriormente, se añade al vaso otra cucharada de azúcar y se mezcla. Mientras se realiza el paso anterior, se va pensando en todo lo que la persona quiere atraer, decretando la estabilidad económica, la buena fortuna, prosperidad y bienestar financiero.
Se dice que este ritual debe efectuarse por tres días seguidos, preferiblemente en horas de la mañana, para aprovechar las buenas energías que genera el sol. Al cuarto día, se tira el contenido del vaso cerca de la casa. Puede ser en un jardín o incluso en una matera. Luego, se guarda el papel y si la persona lo desea, enciende una vela aromática para que lleguen pronto las buenas nuevas.
La época de fin de año son días en los que muchas personas ponen en práctica esta serie de métodos para decretar no solo el dinero, sino otros aspectos positivos, y en esta ocasión puede realizarse con dos ingredientes que normalmente se encuentran en la cocina de cualquier hogar.